Más de medio siglo de trayectoria deportiva vinculado al baloncesto desde el apartado arbitral han hecho acreedor al segoviano Francisco Monjas de ocupar uno de los sitios de honor en el Salón de la Fama del baloncesto español, que en un acto celebrado en el estadio sevillano de La Cartuja celebró la entrega de reconocimientos a “todos aquellos que ayudaron de manera activa al crecimiento de este deporte en nuestro país”.
Monjas se inició de manera autodiacta como árbitro en el año 1968, siendo colegiado profesional durante 21 años, los últimos 14 dentro de la ACB, retirándose en la campaña 96/97 tras haber dirigido un sinfín de encuentros de las diferentes competiciones de Liga y Copa, participando en un mundial femenino absoluto, en varios campeonatos de edad en el ámbito internacional, dirigiendo los primeros partidos de la historia de la Liga ACB, y tomando parte en diecisiete clásicos del baloncesto protagonizados por Real Madrid y Barcelona, para posteriormente pasar a ser director de arbitraje de la ACB hasta que en el año 2021 certificó su retirada.
El segoviano es, junto a Miguel Ángel Betancor, el único árbitro que forma parte de este Salón de la Fama en el que a partir de ahora también se integran, entre otros, José Manuel Calderón, Lolo Sáiz, Aíto García Reneses, Blanca, Ares, Elisa Aguilar, Clifford Luyk o Nino Buscató.
