Ganas teníamos de que empezara la nueva temporada de nuestra querida Gimnástica Segoviana, una vez repuestos de la amenaza del descenso que revoloteó en el ambiente hasta el final de la pasada liga. Necesitaba el club, como nunca, el mantener la categoría en la que estamos.
Nunca había visto un ambiente tan identificado con el equipo. Todos sabíamos que el mantener la categoría era la salvación del club. La Directiva dio los pasos que se debía dar en ese momento y su trabajo dio los frutos perseguidos.
Dije un día que esta Junta conseguiría levantar la nave que estaba a la deriva, y que se encontraba como un auténtico solar. Tuvieron que empezar haciendo una estructura nueva que poco a poco fuera dando otra imagen al club.
Su estructura abarca la mayoría de los campos de donde pueden encontrar apoyo para atajar la tarea a realizar y lo más importante, son respetados en todos los ámbitos tanto provinciales como federativos. Han conseguido reunir un excelente cuadro técnico, con Ramsés, Nacho y Roberto, y el resto de auxiliares a los que hay que darles todo nuestro apoyo.
Son algunos los años que estuve compartiendo, mesa, mantel, balón y viajes, con Ramsés y Nacho, tanto en la Segoviana como en el Claret. Con Ricardo no llegue a trabajar, pero sí sé de su capacidad de trabajo, conocimientos y personalidad. Ahora nos toca a los socios, la tercera parcela y no menos importante, la de seguir y animar al equipo para que, junto con directiva, cuadro técnico y jugadores, se vea que formamos una gran familia deportiva.
