La llegada de inmigrantes a la provincia de Segovia ha descendido de forma importante desde el desencadenamiento de la crisis económica. En opinión del director del Observatorio Socioeconómico de Segovia, Juan Antonio Folgado, se ha producido ya cierta “saturación” que hace pensar que el crecimiento de la población extranjera, alto en la última década, ha llegado a un tope. Sin embargo, este experto advierte que cuando la situación económica mejore la provincia ofrecerá oportunidades para aquellos que sepan adaptarse a la situación.
En este sentido, apuntó a retos como una mayor formación y profesionalización, un mejor conocimiento del idioma y de las “reglas del juego” y una mayor integración social “sin que por ello tengan que renunciar a su cultura y sus orígenes”.
Folgado hizo una radiografía del fenómeno de la inmigración en la provincia dentro de las jornadas organizadas por el departamento de Fundamentos del Análisis Económico e Historia de Instituciones Económicas de la UVa, que en esta quinta edición han estado dedicadas a la inmigración y las políticas públicas.
El director del Observatorio utilizó una serie de gráficos que mostraron a un auditorio formado mayoritariamente por universitarios la evolución de la inmigración en Segovia en algo más de una década. Así comprobaron, por ejemplo, que 2007 fue el año de mayor llegada de extranjeros a la provincia, aunque la cifra fue también muy alta en los años 2002 y 2004.
En opinión de Folgado, los datos relativos a 2007 muestran que en el caso de Segovia sí se produjo un “efecto llamada”, tras el proceso de regularización abierto por el Gobierno. Por otro lado, los datos del último padrón, el de este año, señalan que se ha producido un descenso de más de cuatro centenares de extranjeros en la provincia.
Otros datos que puso de relieve es que la población búlgara es mayoritaria entre los extranjeros residentes en Segovia, un 33,8% del total, seguida de rumanos (15%) y marroquíes (14%), aunque hay también una destacada presencia de latinoamericanos.
Folgado hizo además una relación de los elementos positivos y negativos que conlleva la inmigración para la provincia. Entre los primeros, la aportación al PIB, rejuvenecimiento poblacional, repoblación del medio rural, estímulo a la tasa de actividad, flexibilidad del mercado, mano de obra necesaria en determinados sectores, aumento del consumo, recaudación vía impuestos y Seguridad Social, etc.
Por el contrario, entre los elementos menos positivos incluyó el aumento del gasto público (Sanidad, Educación, Servicios Sociales…), aumento de la economía sumergida, remesas de ahorros a los países de origen de los trabajadores extranjeros, aportación de un alto número de parados en época de crisis como la actual, reducción de salarios en determinados sectores, etc.
Escaso retorno a los países de origen.- El profesor de la Universidad de Salamanca Miguel Ángel Malo habló de “Inmigración y mercado de trabajo: Algunos aspectos económicos” y, a preguntas de EL ADELANTADO, sostuvo, por ejemplo, que a pesar de que la crisis económica se está cebando especialmente con los trabajadores inmigrantes (y sobre todo con los varones), no se está produciendo, de momento, un retorno masivo a sus países de origen. En muchos casos se ha producido una situación de arraigo, bien porque tienen aquí a sus hijos o bien porque han obtenido un contrato de trabajo y un acceso a la Seguridad Social que les hace esperar “hasta que las condiciones se deterioren mucho”, añadió. Un dato poco divulgado que reveló Malo fue que entre las mujeres hispanoamericanas la tasa de actividad es más alta que entre las españolas, incluso durante la crisis, y son uno de los grupos de población con la tasa de desempleo más bajo.
Las V Jornadas de Análisis Económico de la Empresa y las Instituciones, que este año han abordado el tema de la inmigración y las políticas públicas, se clausuraron ayer por la tarde con una mesa redonda en la que intervinieron dos profesoras y un profesor de la Universidad Autónoma de Madrid, con el tema “Balance de la inmigración en España”.
Estas jornadas se inauguraron el pasado miércoles por la tarde con la asistencia de representantes de PSOE, PP, FES y UGT que dieron su visión sobre el fenómeno de la inmigración.
