El presidente del PSOE local y concejal de Deportes, Javier Arranz, ha optado por guardar silencio y no alimentar la polémica, a raíz de fuerte discusión en Facebook con un concejal del PP, que le ha valido una severa reprimenda de la agrupación socialista, a través de su secretario general y compañero en el equipo de Gobierno, Alfonso Reguera.
Con gesto serio, Arranz, en declaraciones a los periodistas, aseguró ayer que «en este momento crucial para España, creo que los políticos deben dar ejemplo, yo voy a dar ejemplo y me voy a callar». Apuntó que se iba a abstener de hacer ningún tipo de manifestación pública porque «los ciudadanos se merecen que estemos al nivel que ellos esperan».
El concejal dio por zanjado el episodio con el viceportavoz del PP, Juan Antonio Folgado, a quien en Facebook le pidió que devolviera el «el dinero que te has llevado de los segovianos tú y tus compañeros de la Caja» y le encuadró entre los «poderosos, caciques y fascistas» de la ciudad. Estas manifestaciones provocaron un comunicado del PSOE local, que Arranz preside, donde el secretario general de la agrupación socialista, Alfonso Reguera, aseguraba que la organización no compartía el «foro, tono y afirmaciones» expresadas en Facebook porque los ciudadanos «merecen el respeto y la educación» de sus representantes políticos. «Algunos [en alusión a Folgado] han dicho que fue un calentón, yo simplemente creo que fue una discusión subida de tono que tiene que terminar porque no beneficia a nadie y, por supuesto, los segovianos se merecen que demos ejemplo», dijo Arranz, con gesto serio.
Folgado atribuyó sus declaraciones en Facebook a un «calentón» y dio por zanjada la polémica con Arranz, al que acusó en la red social de «vivir del cuento», de no tener ética ni credibilidad y de actuar como un «hipócrita y un miserable», le consideró un «bindundi (sic) que no merece la pena» y le recordó que él no fuma pero que le consta que otros afines a él sí lo hacen, «y no precisamente tabaco».
La «reprimenda» del PSOE local, a través de un comunicado remitido a los medios de comunicación, suscitó malestar en Arranz, que, en junio del pasado año, mantuvo una dura pugna con Reguera, para liderar el PSOE local. Al empatar a votos en la asamblea para elegir al nuevo secretario general de la agrupación, se desempolvó el cargo de presidente para que fuera asumido por Arranz, de manera que la agrupación está, en teoría, liderada desde entonces por ambos.
Cargo honorífico
Arranz explicó ayer que el cargo de presidente del PSOE local es un cargo «meramente honorífico» que le lleva a presidir todas las sesiones de la ejecutiva municipal. Lo cierto es que Reguera lanzó el comunicado al margen de su conocimiento y sin que existiera, al parecer, un acuerdo en este sentido por parte de la ejecutiva del PSOE local.
Arranz volvió a insistir ayer en que la asamblea del PSOE local no se reúne desde hace tres meses, y su comité ejecutivo desde hace aproximadamente un mes; por lo que este último comunicado a raíz del episodio en Facebook «no está avalado por ninguna decisión» de los órganos de la agrupación socialista. «Hace un mes que no presido esa ejecutiva, con lo que cualquier manifestación que se haga fuera —en alusión al comunicado— no tiene ningún tipo de sentido».
«Las cuestiones internas con mi partido las suelo resolver en la sede. Ahí es donde pretendo resolver los posibles problemas internos que surgen cuando hay discrepancias de opiniones y ahí es donde voy a hacer mis manifestaciones. Por lo tanto, me voy a callar», añadió.
