Unos 70 ornitólogos de siete comunidades participaron en el último censo de otoño del Refugio de Rapaces de Montejo de la Vega, organizado por el Fondo para el Refugio. El avance provisional de resultados revela que se en estos momento se registran, al menos, 753-756 buitres leonados, cifra similar a la del año 2008, y superior a la de 2009, aunque sigue estando por debajo del récord de 1.117 buitres que se alcanzó en 2004.
En 2010 han llegado a volar 152 pollos de buitre leonado, el número más alto que los 143 de 2009, aunque por debajo del récord de 226 en 2001. Una de las mayores sorpresas ornitológicas de este nuevo censo de otoño ha sido la observación del chorlito dorado; por sexta vez en 36 años, que se sepa, para todo el nordeste de Segovia.
Se registraron, al menos, 26 especies de aves acuáticas. En el embalse de Linares, destacan algunas muy poco frecuentes, como dos garcetas grandes y ocho porrones moñudos. En las zonas húmedas del sur de Burgos, se anotaron agachadizas, correlimos comunes, un rascón oído, etc.
Fueron identificadas también unas 16 especies de aves rapaces (12 diurnas y 4 nocturnas), desde el buitre negro hasta el esmerejón; destacando el búho chico (oído), y el aguilucho lagunero (en el sur de Burgos).
Se observaron como mínimo unas 49 especies de aves no paseriformes, y 54 de paseriformes. En cuanto a las aves esteparias, hay algunas tan interesantes como una avutarda, o una alondra ricotí oída.
Entre los pájaros vistos, destaca el bisbita arbóreo, la collalba negra, la curruca cabecinegra, el reyezuelo sencillo, y en el sur de Burgos el escribano palustre.
Se detectaron al menos 11 especies de mamíferos. Por primera vez para los censos de otoño, pudieron filmarse de noche, con cámaras automáticas y luz infrarroja, una garduña, y jabalí. Entre los carnívoros, se observó un tejón, y rambién fue visto un gato montés, lo que quizás haya sido una de las mayores alegrías de este otoño.