El desvío voluntario de camiones de las carreteras nacionales a las autopistas de peaje se aplaza de nuevo. El Ministerio de Fomento ha retrasado la puesta en marcha del plan, que estaba previsto arrancar ayer día 1 de julio, porque la medida tiene que ser aprobada por el Consejo de Ministros
Según la titular de Fomento, Ana Pastor, el plan empezará en julio “tan pronto lo apruebe el Consejo de Ministros”, aunque no aclaró la fecha. De este modo el Consejo de Ministros aprobará “el acuerdo correspondiente” a lo largo del mes de julio, según el Ministerio.
Con esta medida se pretende reducir el paso de vehículos pesados por las travesías de las carreteras nacionales en aquellos puntos donde existen autopistas. En el caso de Segovia, la propuesta afectaría a la autopista AP-6 (Villalba-Adanero).
La decisión ha sido acogida de distinta forma según los sectores y los lugares. En San Rafael, la reducción del tráfico por la travesía es una demanda largamente solicitada. Sin embargo, en otros municipios como Villacastín o Navas de San Antonio se considera que la medida podría perjudicar a los comercios locales.
Según el Ministerio se trata de una experiencia piloto que se realizará desde el mes de julio hasta noviembre y, dependiendo del día de julio que empiece, va a estar en vigor hasta el mismo día del mes de noviembre, ha precisado.
A nivel nacional, el plan se hará en seis tramos de carreteras , con una longitud total de 326 kilómetros. Los tramos elegidos son N-VI/AP-6: Villalba-Villacastín, N-IV/AP-4: Sevilla-Jerez, N-240/AP-2: Lleida-Montblanc, N-1/AP-1: Burgos-Armiñón, N-550/AP-9: Vigo-Frontera portuguesa y N-630/AP-66: León-Campomanes.
La medida supondrá que los transportistas puedan cambiar su itinerario habitual por las carreteras nacionales allí donde tienen la opción de ir por una autopista de peaje y que Fomento bonifique hasta el 50% de la tarifa. El Ministerio calcula que el plan beneficiará a más de 1,3 millones de camiones de cuatro o más ejes.
El Ministerio de Fomento y la patronal del transporte de mercancías llegaron a un acuerdo a primeros de junio para sacar adelante esta medida, que persigue mejorar la seguridad en las carreteras nacionales y favorecer con ello el uso de algunas autopistas. El Ministerio asume el 50% del coste del peaje. No fue fácil alcanzar este consenso. De hecho, la medida tenía un carácter obligatorio y estaba previsto que entrará en vigor en abril, sin embargo, las diferencias con la patronal obligaron a renegociar y buscar una solución alternativa. Finalmente, se optó por el desvío voluntario.
Los transportistas se han quejado recientemente de que el plan de desvío seguía sin concretarse a una semana de su pretendida entrada en vigor.