El sindicato UGT advirtió ayer del descenso de las garantías de viajar en el AVE que puede suponer el cierre del Centro de Protección y Seguridad (CPS) situado en la estación Segovia-Guiomar de Segovia, que se puso en marcha en el año 2005 con la apertura del nuevo corredor ferroviario.
Según informó el secretario de la Sectorial de Seguridad de UGT, José Rafael Centeno, el CPS sufrió ya un recorte de personal el año pasado con la reducción de plantilla, así como el reajuste de las labores a desarrollar por el personal de vigilancia y de inspección de las instalaciones. Según dijo, el próximo 1 de mayo terminarán su actividad varios de los efectivos de seguridad destinados a este centro, lo que supondrá cinco puestos de trabajo menos en la estación Segovia-Guiomar.
Para Centeno, este cierre «no sólo supone la pérdida de puestos de trabajo, sino también el incumplimiento de una promesa que se le hizo a esta provincia cuando se decidió la instauración del AVE». Igualmente apuntó que el cierre del CPS conllevará «falta de seguridad que no debería existir».
Acompañado por el secretario provincial de UGT, Salazar Calvo, el máximo representante de la sectorial de Seguridad de la central sindical apuntó que la lógica hace que Segovia acoja el lugar donde se desarrollen las tareas de vigilancia de los túneles del AVE por la Sierra de Guadarrama, al encontrarse aquí la mayor parte del recorrido subterráneo, con más de 28 kilómetros de longitud.
Según dijo, estas funciones se centralizarán en Atocha, en Madrid, donde se acumularán al trabajo que ya desempeñan los empleados de Adif para otros recorridos de alta velocidad.
Sobre la justificación que ha dado Adif, el representante de UGT señaló que tan sólo han indicado que responde a motivos «de recorte presupuestario» por la puesta en marcha de nuevas líneas de alta velocidad.
Por su parte, el secretario provincial de UGT, Salazar Calvo dijo que desde el sindicato van a estar «vigilantes» y que harán «lo que sea necesario por el bien de Segovia y de los viajeros».
De acuerdo con los portavoces de UGT, la decisión del Adif conllevará una merma en un servicio que requiere “no recortar ni un sólo euro”, y se refirieron a la importancia que tiene un sistema de transporte masivo y que durante más de 28 kilómetros discurre bajo un gran túnel montañoso.
Entre las hipótesis posibles que requieren una actuación rápida y precisa relataron la posibilidad de que salte algún animal salvaje al interior de las vías, o se cometan sabotajes o amenazas como las ocurridas hace meses en la línea Madrid-Sevilla.
Aunque físicamente el CPS continuará abierto, sólo trabajarán en él personal de Protección Civil y de Mantenimiento. Sin embargo, advierten de que pueda cerrarse de forma definitiva, una vez que se reúnan en Atocha todos los servicios de vigilancia ferroviaria.
Centeno recordó que ya se habían aplicado recortes en otros servicios, como el de personal de patrulla en el recorrido ferroviario, aunque en este caso se compensó con mejoras en los vehículos utilizados.
