El Ayuntamiento de Segovia ha iniciado las obras necesarias para la instalación de un semáforo en la CL-601, carretera autonómica que une la capital con el municipio vecino de La Granja de San Ildefonso. En la actualidad no existe ningún paso de peatones transversal a lo largo de la fachada del barrio de Nueva Segovia. De hecho, el último se encuentra a la altura de los depósitos del agua.
La colocación de un semáforo en esta carretera es una vieja reivindicación de los segovianos, muy especialmente de los vecinos del barrio de Nueva Segovia, a la Junta de Castilla y León —titular del vial—. El Ayuntamiento, a través de la Concejalía de Tráfico y Transporte, también ha solicitado la instalación de un paso a la altura del camping ‘Acueducto’, con el fin de eliminar el riesgo que corren los peatones al cruzar de manera indiscriminada por diferentes lugares sin señalizar.
Ante la falta de respuesta por parte del Gobierno Regional y teniendo en cuenta el peligro que supone mantener la situación actual, la alcaldesa, Clara Luquero, se comprometía con la asociación de vecinos de Nueva Segovia a instalar el semáforo. La Concejalía de Obras y Servicios asumía ese compromiso, ahora convertido en una realidad, con un proyecto cuyo presupuesto asciende a 47.735 euros.
El semáforo se va colocar a la altura del restaurante Lago, en el kilómetro112, antes de la vía de incorporación a la penúltima entrada/salida al barrio de Nueva Segovia. Los primeros trabajos que se están realizando consisten en la ejecución de una zanja bajo los cuatro carriles de circulación para canalizar las líneas eléctricas. Además se va a pavimentar el acceso al paso, rebajando los bordillos, aceras laterales y central, que forma una barbacana de hormigón acabada con baldosa hidráulica de botón rojo. Para ejecutar estos trabajos se están realizando cortes parciales de la calzada, aunque no han afectado a la circulación de los vehículos.
A continuación, la empresa Indra Sistemas S.A. colocará y pondrá en marcha el grupo semafórico que llevará incorporado el repetidor acústico para invidentes y el pulsador de peatones. Las obras se han proyectado de acuerdo a la normativa sobre accesibilidad de Castilla y León. El semáforo funcionará a requerimiento de los peatones y ellos serán quienes determinen cuando parar el tráfico para permitirles cruzar.