´ se recupera de las heridas. El monte calcinado hace ahora un año tiene pulso. La naturaleza, con la ayuda de los cirujanos medioambientales han trabajado durante los últimos 365 días en sacar al bosque del coma. Pero el enfermo no está curado. Deben pasar décadas para que reciba el alta.
Pero hay esperanza. Ese es el mensaje que un año después de la catástrofe medioambiental que arrasó 11.700 hectáreas de los montes de Castrocontrigo transmitió el consejero de Fomento y Medio Ambiente, Antonio Silván, durante su visita a los terrenos arrasados en los que se pueden ver los primeros brotes verdes.
Acompañado de los alcaldes y pedáneos de los municipios y localidades afectadas, el consejero visitó algunos puntos de la zona afectada y comentó que «hace un año era un día muy triste desde el punto de vista forestal, medioambiental, económico y social pero hoy estamos viendo que la naturaleza está viva y podemos decir que hay esperanza». El consejero quiso trasladar un mensaje de optimismo, «muy especialmente a los vecinos, a sus alcaldes y presidentes de las juntas vecinales y decir que seguimos trabajando juntos, como lo hicimos hace un año apagando aquel enorme incendio».
«El denominador común es renovar este territorio. La naturaleza marca su tiempo y los frutos de ese trabajo de regeneración se verán dentro de 30 o 40 años», comentó Silván quien destacó que ya se ha extraído el 75% de la madera calcinada durante el incendio y que esta labor concluirá en otoño. En cuando a la regeneración de la masa forestal, el consejero señaló que el 70% se repoblará naturalmente y el resto recibe ya los correspondientes tratamientos.
