En la variada gama de soportes con los que crea Damaris Montiel conserva siempre una creatividad libre, exuberante, sensual y rica, intentando representar la vida en su diversidad y sensibilidad, con la finalidad de ayudarnos a superar conflictos y a liberarnos de agobios y tensiones tan frecuentes como obsesivos y frustrantes.
Damaris propone al arte un empeño de belleza serena y de erotismo elegante que permite crear obras repletas de dinamismo y de color, de intensidad y de intimismo, ahuyentando violencias y discriminaciones, oscurantismos y censuras. No resulta contradictorio que su obra se nueve entre el glamour y la solidaridad, entre la provocación contenida y la implicación sugerida.
La exposición de pinturas y esculturas que nos muestra en la Galería África de la Casa del Siglo XV de Segovia es un recordatorio de su itinerario creativo, tan maduro como suelto, tan depurado como atractivo. Damaris Montiel nos enseña no solo la soltura y dominio de su lenguaje expresivo, tan interiorizado, tan apropiado, como el desvelamiento refinado de valores estéticos y ciudadanos, en los que se implica la naturaleza y el diseño, lo exquisito y lo primario. Lo urbano y lo instintivo.
Arte y vida se permean y simbolizan. En formas libres y simples se depuran las emociones más profundas. La expresión de Damaris intenta resolver gráficamente la vida.
Recupera sus temáticas constantes, identitarias, del arte como goce de la vida, de la vivencia estética como iniciación del reencuentro con el paraíso. La pintura es un lenguaje encriptado en el que desciframos una erótica vegetal tan plástica como ancestral, tan memoriosa como misteriosa. Incluso los títulos de las obras, todas ST, sin títulos y unos dígitos, nos remite a esa tarea tan rigurosa como mágica. Lenguaje privado, casi de iniciados. Damaris rememora en su arte el papel mágico y ancestral que le transmitiera su abuelo curandero, F. Guevara, de Bayano. El arte como taumaturgia.
Sólo desde ese saber sentir heredado surgen los cuerpos gráciles, los arabescos reencontrados, la pintura dinámica y vitalista de Damaris Montiel
La mujer-tronco y el hombre-rama, la mujer-espiral y el hombre-ángulo. Mujer líquida y hombre dique. Compleja simbología de la naturaleza primigenia, tan reivindicativa como utópica. Las fantasías pintadas de Damaris representan ese momento primario en que la vida era una, los sexos eran indistintos, y la androginia el estado completo y feliz. Memorable jardín de formas y colores iniciales (Speechless), como su inolvidable instalación en la plaza de la Merced en Oxigenarte (2009)
Toda la pintura de Damaris Montiel se construye con una técnica mixta, que en su caso no hace referencia a la mera distribución de pigmentos y empastes sobre el lienzo, sino que viene a representar inevitablemente su imaginario biomorfo, la metáfora poliforma de la vida que se une, se integra, se engendra.
Damaris ha encontrado la habilidad para crear un lenguaje panteista donde la naturaleza se reviste de signos ágiles y henchidos. Casi al azar el color vibra, la pintura se erotiza, el gesto se dinamiza. Es una pintura que baila, de ahí su interés por la cultura negra, por el baile congo. Como bailan los filamentos originales de los que la vida deviene un tejido de formas y colores. Como diría G. Bataille, pintura como eros y sueño, como color y muerte, como pulsión y vida.
La pintura, las esculturas y las joyas de Damaris Montiel surgen de un estado primigenio, no es de extrañar que reivindique ser autodidacta, para que no le mataran el alma, para que no le secaran la memoria.
LA ARTISTA
Damaris Montiel nace en Panamá, viene a España en 1979 y se convierte en una de las principales maniquíes de pasarela para los modistos más acreditados. Pero la búsqueda de nuevas formas es el desafío profundo que mueve a Damaris y que la motiva a convertirse en diseñadora de joyas, escultora y pintora. Desde 1994, reside en la provincia de Segovia.
Como pintora y escultora ha realiza exposiciones individuales, entre ellas recordamos: 1994, «Memoria del Paraíso», Galería Plaza Marina (Madrid). 1998, «Gozando la Vida», Galería EEGEE3 (Madrid). 2002, «No todo es Pintura«, Sala de Exposiciones, Caja de Extremadura (Cáceres). 2006, «Erótica Vegetal», Galería Atecovi (Madrid). 2010, «Erótica Vegetal», Jandequba Gallery, Gorinchem (Holanda).
Desde la exposición en 1989 «Ollas de antes, Ollas de Arte», Centro Cultural Moncloa (Madrid), ha participado en muchas exposiciones colectivas. Entre otras mencionamos: 1997, «Glam Zelestial», Galería Círculo de Bellas Artes (Madrid).»Angeli sopra Roma», Palazzo delle Esposizioni, Roma. 2000, «Canalisis II», Bernheim Gallery, Panamá. «El Museu dels Ängels. Fundació Together in the world», Centre Valenciá de Cultura Mediterránia La Beneficéncia, Valencia. «Museo de los Angeles», Turégano, Segovia. 2001, «El Museo de Los Angeles», Museo de Arte Sacro San Francisco de Asís, La Habana. 2002, «Remembering Gaudi», Hong Kong. 2007, «Lenguaje Corporal» Escultura, V Festival de Diablos y Congos, Portobelo, Panamá. 2009, «Mujer Líquida» Escultura. 2º Metamorphoecomeeting Zartería. Zaragoza. «Naturplás», Oxigenarte, I Festival de Intervenciones Artísticas, Segovia. «Animalario» Escultura. Noche de Luna Llena, Casa del Siglo XV, Segovia. «Reciclarte», VI Festival de Diablos y Congos de Portobelo, Panamá.
Pero sobresale en el diseño y creación de joyas, presentando colecciones especialmente diseñadas para Pepe Rubio, Loewe, Pedro Del Hierro, Nacho Ruiz, Manuel Piña, Miguel Marinero, Pingüin Esmeralda y Cadena, habiendo colaborado con sus diseños en desfiles de moda con Roberto Verino, Miguel Rueda, Elisa Bracci, Rodier, Nina Ricci, Lucha contra el SIDA y Plural. En 1985 participa en la Bienal de Europa Mediterránea, Joyas, Barcelona. En 1987 y 1988, en IBERJOYA, Feria de Joyas, Madrid. 1991, en el Salón Prémiere Classe, Exposición de Joyas, Paris. Ha disenado joyas para programas de televisión, teatro (2004, «Macbeth», dirección de María Ruíz y Ronald Broker), cine y ópera (1989, «Medea», por Montserrat Caballé. Teatro Romano de Mérida).
LUGAR:
Galería África en La Casa del Siglo XV. Plaza de S. Martín. C/ Juan Bravo, 32. 40001. Segovia.
HORARIO:
De lunes a sábado: de 1000 a 1400 hs y de 1700 a 2000 hs. Domingo: de 10,00 a 14,00 hs. Lunes, cerrado. Del 29 de enero al 4 de marzo de 2011.
