“Imágenes de un siglo en España”, el álbum de fotos que ha ocupado durante un mes el Paseo del Salón, fue cerrado ayer. La Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales se lo lleva a otra ciudad española, para volver a mostrar, en cien imágenes, la historia del último siglo, desde el desastre de 1898 hasta el terremoto de Haití.
“Es una exposición muy interesante. Es un recuerdo de lo que ha pasado en España, aunque haya gente a la que no la guste”, declaraba Julia López, una de las últimas personas que recorrió este álbum colectivo de fotos. Al igual que ella, la mayoría del público ha salido complacido tras dar un paseo viendo fotos históricas.
A pesar de la dificultad que entrañaba relatar en un centenar de imágenes —procedentes del archivo de agencia EFE— lo acontecido en el último siglo, el comisario de la exposición, el periodista Alfonso Armada, ha salido airoso de la empresa. “Creo haber conseguido explicar sin sectarismos cómo ha cambiado España en la última centuria”, señalaba la víspera de la clausura.
Efectivamente, nada tiene que ver la España de 2010 con la de 1899, aquella de “los últimos de Filipinas”, los soldados que después de 337 días de asedio arriaron la bandera en la guarnición de Baler, poniendo fin así al imperio español. La exposición ha presentado un recorrido tan rápido como certero. El intento de asesinato de Alfonso XIII, la República, la Guerra Civil, la visita de Eisenhower, el asesinato de Carrero Blanco, Tejero y su 23-F, la victoria del PSOE en 1982, el Prestige o el 11-M, para acabar la conocida foto de Don Juan Carlos I paseando con Adolfo Suárez… Además de grandes acontecimientos, Armada puso especial hincapié en ofrecer imágenes de la vida cotidiana (las niñeras de los años 20, la aparición de la televisión, la victoria de Massiel en Eurovisión, la ‘movida madrileña’) para dar una imagen más cercana a la realidad común.
Desde la Concejalía de Cultura, Clara Luquero, ha insistido en que “el resultado ha sido muy satisfactorio”, a pesar de no poder ofrecer datos de visitantes, dada la ubicación al aire libre de la exposición.
Aunque desde el Ayuntamiento se lamentan las “incidencias” —robos de fotografías y actos vandálicos—, Luquero prefiere quedarse con las “multiples felicitaciones recibidas”, no sin recordar que la exposición es fruto de la colaboración, ya larga, entre la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales y la ciudad de Segovia.