Es curioso que dos clubes de Segovia, que están en las categorías que se ganaron a pulso, tengan caminos tan paralelos, uno jugando con las manos y el otro con los pies. Me refiero a nuestros clubes Balonmano Viveros Herol Nava de la Asunción de la Liga Asobal, y la S.D. Gimnástica Segoviana, de la Segunda División RFEF.
Los dos han apostado fuerte esta temporada, y, sin tirar la casa por la ventana y dentro de sus posibilidades, han conformado unas plantillas que ilusionan, deseando darnos la alegría final a los seguidores. El Nava con sus equipos, uno en Asobal y en Primera Nacional, y la Gimnastica Segoviana, en Segunda RFEF, con el Juvenil en la División de Honor. Estos juveniles tienen que ser la base y cantera del futuro, y estas categorías les pueden dar ese plus que no han tenido antes, aunque les toque esforzarse un poco más.
La meta para ambos es conseguir mantener la categoría como objetivo principal. Tanto uno como otro tienen unas aficiones que para sí quisieran otros clubes de superior categoría. Tanto Julián Mateo, como Agustín Cuenca, además de tener las ideas muy claras, están rodeados de directivas que quieren a su club por lo que representan para Nava y Segovia.
Por el Nava su entrenador, Zupo Equisoain, conocedor como pocos del balonmano español, y Carlos Colomer responsable del Juvenil, y por la Segoviana, su entrenador, Manu González que ya ha demostrado su saber, y Tito Domingo, en el Juvenil de División de Honor.
Además decía Julián en una entrevista que su presidente nunca visitó Nava y su pabellón, y hasta en esto son parejos, puesto que a la Segoviana tampoco le ha visitado ningún presidente desde que está Agustín.
Suerte a los dos.
