A nadie se le escapa que la Gimnástica Segoviana se encuentra en una complicada situación clasificatoria por culpa de su irregularidad lejos de La Albuera. Los números del conjunto azulgrana como local, veinte puntos sumados con seis victorias y dos empates, contrastan con las malas cifras como visitante, después de haber sumado tan solo seis puntos y no conseguir una sola victoria fuera de Segovia, aunque (puestos a ser positivos) cabe señalar que el equipo ha puntuado en la mitad de sus salidas.
Teniendo en cuenta que a la liga regular le restan once partidos, y de ellos seis los tendrá que disputar la Gimnástica Segoviana en La Albuera, resulta lógico pensar que la permanencia pasa, sin duda, por los buenos resultados que pueda lograr el conjunto gimnástico como local, donde se va a enfrentar a cuatro de los conjuntos con los que se jugará la salvación, comenzando por el Salamanca UDS el próximo domingo.
Los cálculos
La cifra que se maneja como la mínima para evitar el descenso oscila entre los 40 y los 42 puntos. Teniendo en cuenta que la Segoviana cuenta actualmente con 26, hacer pleno de triunfos en casa certificaría la permanencia, pero no estaría de más sumar fuera de casa para evitar que todos los encuentros en La Albuera sean finales a vida o muerte.
Por el municipal segoviano pasarán, además del conjunto charro, un Compostela que baja sus números fuera de casa, con dos victorias y seis empates en once partidos, el Leganés B que aparece como uno de los rivales más peligrosos como visitante, más el Arenteiro, el Llanera y el Palencia Cristo, estos dos últimos conjuntos llegando de manera consecutiva a La Albuera, porque una de las razones por las que esgrimir un moderado optimismo acerca del futuro de la Segoviana en la Segunda RFEF reside en que, de las once jornadas que restan, seis las va a disputar el equipo gimnástico en casa.
Ya como visitante, los dos próximos compromisos aparecen como de máxima exigencia, con las visitas a Pasarón y El Soto para enfrentarse al Pontevedra y al Móstoles respectivamente, siendo los tres últimos partidos como visitante los que aparecen como vitales en el caso de que en casa no se logren los puntos suficientes como para amarrar la permanencia. Bergantiños, posiblemente a esas alturas de la competición ya sin nada por lo que pelear, Marino de Luanco y Coruxo, dos directos rivales por la permanencia, aparecen en un horizonte final de una temporada regular a la que la Segoviana llega en una situación que seguramente envidiarían los cinco conjuntos que marchan por detrás en la clasificación.
El Salamanca UDS, arropado
El Salamanca UDS, que solicitó a la Gimnástica Segoviana un centenar de entradas a un precio de 22 euros (subvencionándolas al cincuenta por ciento a sus abonados), pidió al club azulgrana otro centenar de entradas para el encuentro del domingo, por lo que se calcula que el equipo que ahora dirige María Hernández llegará a La Albuera arropado por alrededor de centenar y medio de aficionados, lo que asegura una buena taquilla para el club azulgrana.
Por su parte, la Gimnástica Segoviana continúa con la venta anticipada de entradas a diez euros para que puedan ser adquiridas por los socios, y ha entregado una entrada a todos los futbolistas del los conjuntos de base del club, con el fin de que el ambiente en las gradas de La Albuera sea el mayor posible de cara al encuentro que se plantea como muy importante de cara a la permanencia, puesto que el Salamanca UDS se encuentra en la clasificación dos puntos por detrás de la Segoviana, y todavía con un partido aplazado por disputar. El equipo charro no consiguió puntuar en el primero de sus aplazados ante el Compostela, frente al que perdió por 4-2, aunque remontó el pasado fin de semana venciendo al Llanera por 2-0, demostrando que ha solucionado los problemas con el gol que le acuciaban desde el principio de la temporada.
