El santuario de Nuestra Señora de La Fuencisla aborda desde hace un par de semanas las obras de renovación del suelo del presbiterio del templo, con el objeto no sólo de devolver el esplendor a una de las partes más importantes del edificio, sino de garantizar la seguridad y evitar un mayor deterioro.
Desde el pasado 21 de enero, los técnicos y operarios de la empresa Barzabales –a quien se ha encargado la obra- llevan a cabo los trabajos con arreglo a las especificaciones técnicas del proyecto, que contempla no sólo la recuperación de este espacio, sino también el saneamiento de todo el espacio.
El vicepresidente de la Real Cofradía de La Fuencisla, Julio Boreguero, señaló que la decisión de llevar a cabo las obras se adoptó ante el preocupante estado del suelo, que se encontraba “en muy malas condiciones”, y señaló que se habían producido algunos hundimientos que aconsejaban una rápida intervención.
El proyecto prevé el levantamiento y sustitución de toda la estructura de madera que conforma el suelo del presbiterio, que se realizará respetando su diseño, según explicó Borreguero. Así, indicó que los trabajos tendrán una duración “entre tres y cinco semanas”, y devolverán al templo esta estructura en condiciones idóneas tanto para la visita como para el desarrollo de los cultos religiosos.
Las obras han obligado a emprender una reorganización provisional de los espacios, así como a adoptar medidas para la preservación de elementos como el retablo, el camarín o la propia imagen de la Virgen de la Fuencisla. Así, la zona de obras ha sido protegida con plásticos opacos para evitar el polvo generado en los trabajos, y ha sido retirado el sagrario con el Santísimo para trasladarlo a la sacristía mayor, que ha sido habilitada para la celebración de los cultos diarios que se celebran en el templo.
Además, la imagen de la virgen se ha trasladado también a esta sacristía, donde puede verse en el interior de la vitrina que mostraba el manto que la Reina María Cristina obsequió a la patrona de Segovia, y que se encuentra en su estado original sin revestiduras.
Julio Borreguero manifestó que los cambios realizados permitirán que tanto el culto como las visitas puedan desarrollarse con normalidad, y los horarios de misas no cambiarán. Asimismo, precisó que los domingos, si la afluencia de fieles fuera mayor que el reducido espacio de la Sacristía, la misa se dirá en la zona exterior al presbiterio para evitar aglomeraciones.
El presupuesto de estas obras rondará los 40.000 euros, cantidad que asumirá el santuario, aunque desde la Cofradía ya se ha mostrado la intención de colaborar en sufragar los gastos “si así se requiere”, según explicó el vicepresidente.
De cara al futuro, y una vez terminadas estas obras, la cofradía resalta la necesidad de abordar la restauración de algunos elementos del camarín de la virgen, como las puertas de madera que protegen la imagen. En este sentido, Julio Borreguero indicó que se ha constatado la necesidad de reformar tanto las bisagras como las sargas de tela que cubren sus vanos, aunque por el momento el proyecto “no es más que una intención”.
Carmen Martín Guillén, nueva presidenta
La anterior secretaria de la Real Cofradía de La Fuencisla, Carmen Martín Guillén ha sido elegida nueva presidenta de esta institución en la asamblea celebrada para la renovación de los cargos el pasado mes de enero. Martín Guillén reemplaza a Julio Borreguero en esta responsabilidad, que ha asumido los últimos seis años, mas otro de prórroga motivado por la pandemia, y su nombramiento deberá ser ratificado por el obispo César Franco, conforme a lo estipulado en los estatutos.
