Con la sexta ola remitiendo a buen ritmo y tras las últimas medidas adoptadas, el Ayuntamiento de Cuéllar mira al futuro más próximo y trabaja ya “sobre un escenario de normalidad para este 2022”. Así lo confesaba el alcalde, Carlos Fraile, que ha hablado de las fechas señaladas en el calendario cuellarano y que sí se celebrarán si todo sigue su curso como hasta ahora. No descarta las mascarillas y todas las precauciones que dicten las autoridades sanitarias, pero cuenta con que Carnaval, Semana Santa, la Feria Multisectorial, la de la Juventud, las fiestas locales y San Miguel se celebren con toda la normalidad posible.

En ello trabajan ya desde el equipo de Gobierno, que pone el punto de mira en la Feria Comarcal, que se celebrará los próximos 14 y 15 de mayo. Tras entrar en el Ayuntamiento, PSOE e IU trabajaron ocho meses por dar continuidad al proyecto de la feria, que se empezó a truncar con una licitación de carpa desierta y, finalmente, con la pandemia. Este año sin feria “ha servido para reflexionar”, como reconoce el alcalde, que afirma que los 70.000 euros de alquiler de una carpa para tres días ha sido determinante, junto con la situación actual, para dejar atrás “un esfuerzo económicamente tremendo”.

Así, la opción para este 2022 pasará por carpas individuales y tipo jaima, que albergarán estands de exposición, de compra-venta, de degustación, y que contarán también con escenarios para amenizar una feria que también pretende tener actuaciones musicales y conferencias. La situación sanitaria ha motivado optar por este formato de infraestructura, abandonar el recinto cerrado y dejarlo al exterior, con 50 expositores, porque este año “primará la calidad y no la cantidad”, explica el alcalde.

Por otro lado, tendrán prioridad los expositores locales, comarcales, provinciales y regionales. Fraile “no encuentra sentido” a que vendedores de, por ejemplo, Valencia “vengan a vender muebles teniéndolos en la villa y en la comarca, y que además se beneficien de una bonificación por poner su estand”. Con ello reitera que se la feria se centrará en la producción local y comarcal, que no habrá “la presión de tener que llenar de expositores una carpa”, y que se busca la creación de sinergias entre productores.

Para este cambio de 360 grados a la Feria, el equipo de Gobierno se ha reunido con algunos miembros del CIT que han mostrado su acuerdo a este nuevo formato. Fraile asegura que el anterior “estaba totalmente agotado, sin valor añadido”. Se reafirma en que hay que adaptarse a los cambios, a las nuevas formas de venta más digitales; “los cambios en Cuéllar son difíciles, pero hay que ser valientes y apostar por ello para evaluar después cómo ha funcionado”, ha explicado.

Las bases se van a elaborar en estos días para que estén abiertas cuanto antes las solicitudes. Será el propio equipo de Gobierno quien realice la selección de expositores, por lo que la idea de priorizar la ejecutarán desde dentro. Para la elaboración de las bases están abiertos a opiniones tanto del CIT como de productores que quieran aportar a este giro a la Feria Comarcal. Lo que sí ha dejado claro el alcalde es que el carácter de esta Feria será, sobre todo, gastronómico, y se barajan sectores tradicionales como el mueble, la artesanía o la automoción, que tendrán su sitio pero todavía se está definiendo cómo encajarlos en la que será una renovada Feria Comarcal de Cuéllar en 2022.

Las fiestas, con “normalidad”

La Feria Comarcal es el primer gran hito de este año pero, inmediatamente después y a pesar del tiempo que las separa, los vecinos de la villa ponen su mirada en las fiestas patronales, las de los encierros. El alcalde confirma que también se trabaja “con normalidad en esto”, y por ello se han mantenido reuniones esta semana. Se ha cerrado la parte festivo-cultural para la fiestas esta misma semana, para ir configurando el que será el programa de las mismas y que Cuéllar lleva dos años sin disfrutar. Afirma Fraile que el formato será el de siempre, con el pregón el sábado y primer encierro el domingo.

Respecto a los encierros, se espera poder celebrarlos con normalidad “porque ya desde septiembre se han venido realizando en muchas localidades”. Sobre las ganaderías protagonistas de estas ansiadas fiestas, el alcalde habla de que se llevan estudiando desde diciembre; “hemos dado muchas vueltas que ya se explicarán”, anuncia. Por ello, el trabajo continúa pero sobre unas bases que pronto se darán a conocer.

Para el alcalde de la villa este -espera- sea el primer año de normalidad a pesar de ser el último completo de la legislatura. La pandemia ha hecho un paréntesis en estos dos años, pero con las medidas anunciadas en Castilla y León y el uso de mascarilla en exterior cuestionándose, cabe pensar que el camino a la normalidad se hace más corto.