Barcelona y Valencia disputaron ayer un fantástico encuentro en el Camp Nou, que ganaron los locales gracias a una segunda parte en la que jugaron casi a la perfección, después de que el equipo de Unai Emery cuajase una sublime primera mitad.
Hasta el descanso, los ‘culés’ se vieron perdidos en un compromiso en el que ni la pelota era suya ni tampoco las ocasiones. Los visitantes les fueron a buscar con su presión y les negaron los espacios.
Ante esta situación, el bloque levantino controlaba el duelo a su ritmo y el combinado azulgrana se embotellaba. La escuadra perdía demasiados balones, Villa estaba aislado y Messi desaparecido. El Valencia llegó a colocar incluso a cuatro hombres (Soldado, Banega, Pablo Hernández y Albelda) cerca de la frontal del rival, con el objetivo de que la pelota acabase a menudo en los pies de Valdés, que no tenía otro remedio que lanzar en largo.
Los de la Ciudad Condal no encontraban soluciones para hacer frente al planteamiento del adversario. En acciones aisladas, salía la calidad del Barça y se notaba el peligro, pero no existía la continuidad en la amenaza.
En el minuto 22, Xavi lo intentó desde lejos, pero un silbado e inspirado César atrapó el esférico con enorme acierto. Poco después, una buena incursión de Bruno por la banda dejó un balón franco a Soldado, quien conectó de volea sin éxito.
De cualquier modo, el que terminó golpeando fue el Valencia. Una penetración de Mathieu en el minuto 38 por la banda izquierda, tras recibir una pelota de Banega, concluyó con el premio del gol, ya que remató a la red Pablo Hernández para sellar el 0-1.
El Barça acusó el impacto, pero el oponente, en la mejor jugada del choque, no sentenció y lo pagó caro.
Antes del descanso, Banega se deshizo de tres rivales en la banda, asistió a Soldado y éste dejó la bola de nuevo a Pablo Hernández. El centrocampista se topó con una maravillosa parada de Valdés.
Los locales también perdonaron en el minuto 45, cuando Leo Messi se enredó en el área pequeña. Incluso así, sacó un disparo que neutralizó Bruno cuando ya se colaba en la portería.
El panorama cambió con rapidez, puesto que, en la primera acción de la segunda parte, el conjunto de Pep Guardiola empató merced a un meritorio tanto de Iniesta. El manchego recibió un pase certero de Xavi, que compitió a pesar de sus problemas físicos, y definió con maestría para sellar las tablas.
Luego, la eficaz pareja formada por Messi y Alves conectó en el minuto 60, para crear una acción espectacular en la que un remate de cabeza de Villa acabó con una salvadora intervención de César. El asturiano buscó la diana con tesón frente a sus antiguos compañeros, pero las circunstancias no le acompañaron y, además, le faltó puntería.
Un defensa, el capitán Puyol, apareció para desequilibrar la balanza. Una de sus incorporaciones al ataque le permitió rematar de cabeza para anotar el 2-1 final.
