Si el año 2020 fue catastrófico para casi todos los sectores, el actual 2021 tampoco ha resultado mucho mejor para el sector primario de la provincia. Todos los profesionales del campo coinciden en hacer su balance negativo del ejercicio que ahora acaba.
La pandemia ha vuelto a marcar el 2021, un año que comenzó con la apariencia de que el proceso de vacunación iba a devolver la normalidad a todos. Los agricultores y ganaderos también sentían que el hecho de que se recuperaran los precios de sus productos en pleno verano suponía un despegue de la recuperación económica. Pero se dio la extraña circunstancia de que en plena recolección del cereal se encarecían los precios, algo insólito en el campo segoviano.
Para la Coag, la pandemia y la crisis de las materias primas están creando una situación “inédita en la historia de la agricultura: precios de insumos que se triplican en solo un año, precios de las producciones que bailan sin lógica”.
Desde Asaja también se refieren a esta caótica situación. Donaciano Dujo destaca la “incertidumbre” y “ preocupación” por la carestía que han tenido y tienen los costes de producción. Una explotación de 200 hectáreas en la que se hayan sembrado 150 de cereal, “ha tenido un incremento este año de más de 10.000 euros solo en fertilizantes y gasóleo”, asegura a modo de ejemplo.
En la Unión de Uniones argumentan que el sector primario ha experimentado este año dos crisis. Una primera provocada por el encarecimiento de la electricidad, “que ha ido a más a medida que pasaban los meses y que ha contagiado al gasóleo agrícola, a los piensos y los fertilizantes; es decir, a más de las dos terceras partes de los inputs que necesitamos los agricultores y ganaderos”. La otra crisis es la que angustia sobre todo a los ganaderos de vacuno de leche : “Un sector asfixiado por unos costes de producción que no paran de subir y una industria y una gran distribución que ejercen implacablemente su posición de dominio en los mercados e imponen unos precios que no remuneran en absoluto el inestimable trabajo que realizamos. Porque no lo olvidemos, nos dedicamos a producir alimentos”.
PAC Y GOBIERNO
También este año se ha avanzado algo en el diseño de la nueva Política Agraria Común (PAC), sobre la que Asaja mantiene que “si ha sido malo lo que ha aprobado Europa, mucho peor es el desarrollo que ha realizado el Gobierno de España, al buscar una PAC para ganar votos y que ha castigado a los profesionales de la agricultura”. Por primera vez, señala Donaciano Dujo “el Gobierno va a dar más ayudas por hectárea o cabeza de ganado a esas explotaciones pequeñas, que son de agricultores a tiempo parcial, que a los profesionales del campo. Algo nunca visto, pero se va a castigar al agricultor profesional para buscar votos entre aquellos que no lo son”.
Desde Uccl siempre han defendido que las ayudas vayan a parar al agricultor a título principal. El coordinador regional, José Manuel González Palacín, reprocha al ministro Luis Planas que haya dado “un vuelco absoluto” y haya cambiado los conceptos inicialmente previstos: “Introdujo como condiciones para percibir las ayudas asociadas de la PAC ue el 25 por ciento de los ingresos sean agrarios, que se esté dado de alta en la Seguridad Social o que los que cobren menos de 5.000 euros no tengan que cumplir estos requisitos, situación esta última que abre una gatera más grande que la puerta y frente a lo que dispone Uccl bajo el lema de que la PAC sea para los agricultores y ganaderos a título principal”.
También lamentan desde Uccl el problema importante que va a suponer para el campo de Castilla y León la introducción de siete nuevos ecoesquemas que se van a “llevar el 23 por ciento del presupuesto de la nueva PAC sin medirse previamente las consecuencias que van a tener a nivel ambiental o económico”.
José Manuel de las Heras, coordinador estatal de Unión de Uniones también es tajante en este aspecto: “Una decepción que nos hemos llevado en 2021 ha sido el recule del Ministro Planas en el enfoque del Plan Estratégico de la PAC en cuanto a los agricultores y ganaderos profesionales. Durante un tiempo, tuvimos la percepción de que desde el Ministerio de Agricultura se apostaba por orientar la PAC en favor de quienes fundamentalmente viven del trabajo en su explotación (…) .pero en la última fase el ministro ha usado la coartada del ‘consenso’ para plantear una definición de agricultor activo beneficiario de las ayudas PAC que va a corregir poco o muy poco los actuales desequilibrios en el reparto de ayudas”.
CRISIS GANADERA
Desde UPA también hacen un balance negativo del año 2021. En esta organización dicen que ha sido “económicamente muy malo para el sector agrario de Castilla y León, condicionado aún por las medidas restrictivas del 2020 debido a la pandemia, a lo que hay que añadir precios bajísimos en origen en bastantes sectores y desorbitados costes de producción”.
La situación es límite en algunos casos como el de la leche. Los productores siguen soportando “la presión de unos precios por litro de leche en origen que ni siquiera cubren los costes de producción. Reclamamos precios justos que garanticen la viabilidad de las explotaciones de vacuno de leche de Castilla y León que no deberían estar nunca por debajo de los 0,41 euros/litro”, dicen en UPA.
En este aspecto, todas las organizaciones agrarias y ganaderas están de acuerdo y anuncian nuevas protestas en el próximo año como las ya realizadas.
