Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea abrieron ayer la puerta para negociar con el régimen de Bashar al Assad, al tiempo que manifestaron preocupación por las acciones militares rusas en Siria e instaron a Moscú a coordinar sus ataques con la coalición internacional encabezada por Estados Unidos contra el Estado Islámico y a dirigirlos contra los grupos terroristas y no la oposición moderada. El Gobierno francés fue asimismo el más reacio a aceptar que el presidente sirio pueda tener un papel en la transición política en el país, algo que acepta una mayoría de países según fuentes diplomáticas.
“Para la paz en Siria hace falta una transición política. Debe hacerse sin Bashar al Assad”, defendió el secretario de Estado de Asuntos Europeo galo, Harlem Désir, que dejó claro que Rusia “debe permitir la salida” del presidente sirio a su llegada a la reunión de ministros de Exteriores de la UE en la que discutirán, divididos, el papel del mandatario sirio en la transición política.
Como fórmula de compromiso, los Veintiocho negociaron un texto en el que dejaron claro que “no puede haber una paz duradera bajo el liderazgo actual” e instaron a “todos aquellos con influencia en las partes, incluido sobre el régimen sirio, a utilizar su influencia para alentar un papel constructivo en el proceso que lleve a una transición política y para poner fin al ciclo de violencia”, según el borrador del texto de conclusiones al que tuvo acceso Europa Press
Asimismo el ministro de Exteriores británico, Philip Hammond, dejó claro que no se podría aceptar al presidente Al Assad “como solución a largo plazo para el futuro de Siria” pero abrió la puerta a “ser flexibles sobre la forma de su salida” y “sobre el calendario” para ello. “Urge poner en marcha esa negociación y la negociación sólo es posible teniendo sentado en la mesa al régimen de Bashar al Assad”.
