La figura y obra del poeta de “Ribera de los alisos” estuvo presente y cercana en el acto cultural de homenaje que le dedicó hace unos días la Asociación Cultural “La Protección Obrera”, con la finalidad de “sumar iniciativas para fomentar el conocimiento de la vida y obra literaria de este poeta con tan fuerte arraigo en nuestro pueblo. Su obra está alcanzando una gran expansión y repercusión, en ella también figura nuestro pueblo, sus gentes y sus parajes. Sus vivencias en la casa del Caño ó casa de Los Becerriles como en Nava siempre la hemos conocido”, según dijo el presidente la asociación, Francisco Marugán.
En el acto, titulado “Después de la muerte de Jaime Gil de Biedma”, se presentó el documental de Inés García Albi “Jaime Gil de Biedma. Retrato de un poeta”, realizado por Antonio Cortés y producido por TVE, cuyas imágenes recogen testimonios de familiares, poetas, escritores, amigos y seguidores de Jaime Gil de Biedma, que sirvió como enlace a la mesa redonda compuesta por los poetas Santos Domínguez, y Fernando Romera, más el escritor Francisco Ruiz de Pablos y de José Antonio García-Albi, sobrino del poeta y colaborador del documental, poniendo una voz casi confundida con la de su tío. Documental y mesa redonda que no sólo cautivó a los numerosos asistentes, sino que contribuyó a conocer más la dimensión poética y humana de “un poeta que quiso ser poema y por ello dejó de escribir poesía”, como sentenció el poeta abulense Romera, en el contexto de razonar el afán que mantuvo por buscar el poema perfecto”.
Tiempo poético
En opinión de los componentes de la mesa, coordinada por el escritor local Amador Marugán,
Jaime Gil de Biedma dijo todo lo que tenía que decir, “y muy bien” en su obra y por ello el tiempo poético se le acabó, señalando como ejemplo la perfección del poema “No volveré a ser joven”. se reafirmó al señalar que “el personaje de Jaime es la juventud, después de los cuarenta fue un erial”.
La influencia de poetas como Catulo y Ovidio y de Kabafis en esta generación denominada de los cincuenta -que en palabras de García -Albi, apuntaba que su tío le comentó que no era tal, si no la coincidencia de un grupo de amigos que hacían una poesía completamente distinta- en formular experiencias poéticas en segunda persona en las que cada uno se ve reflejado así mismo en el contenido, se señalando con ejemplos el texto de José A. Goytisolo en “Bolero”, dedicado a Jaime Gil de Biedma, y que éste a su vez dijo: “joder que bien se ha retratado J.A. Goytisolo , y la propia de Gil de Biedma “A través del espejo” dedicado a su buen amigo Gabriel Ferrater.
Referente a si J.G.B. escribiría hoy la misma obra, la confluencia de opiniones fue rotunda en afirmar que al poeta en el momento que se le rectifique el pasado, el presente es completamente distinto, no ya en su forma de escribir, si no en sus tiempos de escribir. Mesa que se cerraba con un interesante debate introducido por Ruiz de Pablos, en su faceta de traductor, sobre la fidelidad de mantener ritmo y musicalidad a la hora de traducir poesía. Algo se consideró muy complicado por el significado de la palabra en cada idioma, según la propia experiencia de los poetas.