La villa de Cuéllar y alrededores vive estos días inmersos en las celebraciones de la Navidad, pero en El Henar está muy presente, como todos estos meses, el Año Jubilar. Esta celebración tan especial está siendo motivo e impulso de muchas mejoras que el Santuario y todo el entorno de este especial enclave demandan de un simple vistazo. Poco a poco se van realizando arreglos, acondicionamientos, mejoras sustanciales en infraestructuras, y esta pasada semana se realizó la de uno de los hitos del paraje, la fuente de San Antonio.
Situada en la pradera y frente a la puerta principal del Santuario, esta fuente contaba con un aspecto muy descuidado debido al paso de los años. Construida e 1833 y de estilo neoclásico, contó con Andrés Mazar como maestro de obras. El rector de El Henar, Carlos García Nieto, anunciaba las primeras ejecuciones de su rehabilitación; se le ha aplicado una limpieza a fondo como inicio de la recuperación de su entorno. “Deseamos dar un toque acogedor al espacio de esta fuente”, reconoce el rector. Seguidamente se reparará la fuente, puesto que el sistema ha sufrido el paso de los años.
A su alrededor se quiere conformar un espacio de encuentro para la comunidad de Villa y Tierra, que financia esta obra; por ello, se van a añadir los nombres de todos los pueblos de la comunidad en los respaldos de las bancadas de piedra adyacentes, más una placa conmemorativa. Todo ello se inaugurará el próximo día de la comunidad de Villa y Tierra, el día 2 de julio. “Será una fiesta grande y bonita”, comentó el rector. García Nieto se dirige a la comunidad, “a la que agradecemos su generosidad”, como artífice de una de las muchas mejoras que demanda el Santuario.
Otras obras
La lista de peticiones y trabajos es larga y se suman todavía mejoras en la Fuente del Cirio, que se pintará por dentro para “dejarlo con otro aire”, además de dotar a este espacio de una iluminación que revalorice el lugar.
Otra de las partes que el rector destaca como punto de mejora es la escalinata principal al Santuario. Asegura que es algo que desde su nombramiento tiene en mente; existe un gran deterioro en las escaleras, pequeñas erosiones en la piedra “que la gente mayor puede sufrir”. Comenzarán por aplicar un pequeño tratamiento de resina que corrija irregularidades, “porque no nos podemos meter a reconstruirla nueva, no hay condiciones económicas”, asegura. Estas primeras medidas serán un tratamiento que palie los hoyos y doten de más seguridad a las escaleras. El día de mañana y cuando la economía lo permita deberán ser sustituidas por nuevas escaleras “respetando la textura antigua”, comentó el rector.
Asimismo, otra de las obras que el rector tiene en mente desde sus primeros días al frente del Santuario es la recuperación de las bóvedas del crucero del Santuario. “Están ennegrecidas, desconchadas por las goteras”, explica. No puede poner fecha a esta recuperación aunque se sabe que durante el jubileo es inviable, ya que el andamiaje abarcaría más de seis meses instalado. “Ya está presupuestado”, afirma el rector, pero no será la Junta de Castilla y León la que sufrague los gastos de esta obra, puesto que el Santuario no se cataloga como Bien de Interés Cultural al ser un inmueble.
García Nieto reconoce que esta obra solo podría financiarse con empresas o “si todos los devotos empezáramos a arrimar el hombro”, bromea el rector. En la parte alta del Santuario, el tejado también acusa el deterioro, y la espiga en la que se encuentra la cruz “se ve que no está bien”, comenta el rector.
Carlos García Nieto reconoce que estas demandas son obras que podrían ejecutarse en un plazo de diez años, poco a poco, y que se ha avanzado mucho en poco tiempo gracias a la colaboración de instituciones y de devotos. Queda pendiente en estos días la recogida del manto de la Virgen de El Henar que la junta va a restaurar y debe estar listo para junio, cuando se celebren 50 años de la coronación canónica de la virgen, otra fecha señalada dentro del Año Jubilar Henarense.
