La piscina cubierta José Carlos Casado abrió sus puertas el pasado 7 de septiembre después de un período veraniego en el que el Instituto Municipal de Deportes realizó una serie de mejoras en la instalación que desde hace prácticamente tres años viene gestionando la empresa Forus, en una concesión que prácticamente desde el primer día se ha venido encontrando con el descontento de los usuarios.
En estos últimos meses el Ayuntamiento de Segovia ha seguido adecuando la instalación a los parámetros establecidos por la Junta de Castilla y León, intentando compaginar las obras con el normal funcionamiento de la piscina, evitando su cierre aunque fuera de manera parcial para que los usuarios no se vieran afectados.
No ha sido sencillo bregar con todo ello, y aunque finalmente el Instituto Municipal de Deportes consiguió todas las certificaciones necesarias para que la instalación pasara las inspecciones de la Junta, las quejas de los usuarios han seguido llegando, y las redes sociales han sido el altavoz por el cual estas se han venido sumando. La rejilla del techo de la piscina sin colocar o la temperatura del agua que en ocasiones aparecía turbia y con un tono verdoso han sido algunas de las actuales quejas de los usuarios, que anteriormente ya habían expuesto su malestar por la supresión de algunos de los grupos de natación, las actividades de sala o el cambio de sistema de niveles por rangos de edad.
El descontento de los usuarios con la gestión, y con los problemas de la instalación, han sido constantes en los últimos años
El cansancio del IMD con esta situación de la piscina cubierta y la empresa concesionaria le ha llevado a no ejercer el año opcional que tenía Forus para continuar con la concesión, aunque la empresa tampoco estaba muy por la labor, y así abrir el proceso administrativo para que una nueva empresa entre a gestionar el servicio.
De momento la Concejalía de Deportes ha llegado a un acuerdo con Forus para que se mantenga al frente de la concesión hasta que el concurso llegue a su fin, algo que todavía tardará algún tiempo en producirse puesto que algunos de los datos que recabó el IMD para establecer el pliego de condiciones no eran exactos. Sea como fuere, el periplo de Forus al frente de la piscina cubierta José Carlos Casado está cerca de tocar a su fin. Otra cosa será comprobar si con su salida se acaban también los problemas en la instalación.
