La selección española derrotó ayer con un gol de David Silva a cuatro minutos del final a una seria Colombia, que supo arrebatar la alegría del fútbol a la ‘roja’, en plena fiesta en las gradas del Bernabéu con comunión de aficiones, que comprobó que la campeona del mundo no está para amistosos.
El combinado nacional venció sin brillo. Evitó las malas experiencias de los tres amistosos disputados tras tocar el cielo en Sudáfrica. El empate en México y las duras goleadas en Argentina y Portugal eran lecciones aprendidas, pero la saturación de partidos que arrastran los internacionales se acusan en noches donde en juego tan solo está la imagen.
Pero España dejó detalles que satisfacen los paladares futbolísticos más exigentes. Un control en el aire de Iniesta haciendo recordar en el Bernabéu la imagen de Zidane fue la muestra. El estadio entero coreó el nombre del gran héroe de Johannesburgo. El dominio fue patrio pero fue uno de esos encuentros en los que faltó movilidad en ataque.
Comenzó Colombia con 10 hombres por detrás del balón, dejando tocar a su rival. Sabía lo que hacía. Sin correr peligros para acabar creando más ocasiones claras. Se topó con el capitán, inspirado en su estadio. A los 13 minutos, una jugada que nació con el criterio de Giovanni Moreno, acabó con Abel Aguilar rompiendo la línea defensiva de España pero sin saber superar al capitán.
Un testarazo desviado de Perea, un remate de Dayro Moreno y un ‘jugadón’ de Armero, que se fue de los dos centrales y ante Casillas disparó con el exterior de su pie derecho, pero el balón cogió el efecto contrario y no encontró puerta, cerraron el primera acto. España no encontraba el camino.
Siguió sin hacerlo en la reanudación. No ayudaron los continuos cambios que cortaron el ritmo, pero a la ‘roja’ le faltó la intensidad necesaria. Existe diferencia entre los amistosos y los partidos oficiales, donde mantiene su imagen demoledora. En cambio, el cuadro visitante si tomó el duelo con la seriedad de competición. Intensa. Dura en el marcaje cuando lo necesitó.
Basó su juego en la fuerza defensiva y redujo su presencia en campo contrario. En una contra, pudo abrir el marcador Cuadrado. No acertó por un toque en el último segundo de Arbeloa que le incomodó en su disparo. Un potente disparo lejano de Guarin obligó a Casillas a sacar los puños. Y un error de Silva casi le costó el gol al bloque que dirige Vicente del Bosque. España falló más pases en un partido que en todo el Mundial.
En ataque no dejaba noticias. Ni la entrada de Torres aportó remate. Cazorla aumentaba la movilidad, disparaba cruzado en la única acción de peligro antes de acabar con dos delanteros.
Saltó al campo Llorente a nueve minutos del final en un movimiento que debió hacer antes Del Bosque, y llegó el gol. Silva remachó a gol un centro de Navas.
Pudo empatar Colombia, pero Rodallega no estuvo fino en la definición. Al final se escucharon más a los españoles, pero la campeona del mundo ganó sin encontrar la senda de la diversión.
Otros amistosos:
Dinamarca-Inglaterra 1-2
Alemania-Italia 1-1
Portugal-Argentina 1-2
Francia-Brasil 1-0
