La justicia es esa tortuga que parece que no va a llegar nunca a la meta, pero que finalmente llega. Los jugadores y el entrenador del extinto Segovia Futsal pueden dar fe de ello, porque más de dos años después de que se iniciara el lento camino de las reclamaciones de las cantidades que el club les dejó a deber, la justicia les ha dado la razón en lo que se refiere al dinero que la Comisión Mixta de la Liga Nacional de Fútbol Sala no reconoció como deuda.
La labor de la Asociación de Jugadores de Fútbol Sala ha conseguido que el Fogasa se haga cargo de esas cantidades, que oscilan entre los 1.500 y los 10.000 euros, correspondientes a los conceptos de manutención, dietas, primas y la indemnización por finalización de contrato.
No hay que olvidar que esta reclamación fue objeto de una controversia entre el Segovia Futsal y la Liga Nacional de Fútbol Sala, ya que el club denunció en su día que la LNFS no solo no le había dado traslado de las denuncias de los jugadores ante la Comisión Mixta, sino que también le inquirió para que firmara un escrito señalando que sí había recibido esas denuncias, pero por una cantidad menor a la que realmente se adeudaba”, algo a lo que el club se negó.
