Son días de nostalgia, recuerdos y lloros en la comunidad educativa del colegio Sagrado Corazón. La directora general, la hermana María del Sagrario de Andrés García sabe que esto no ha hecho más que empezar. “Mañana comenzará a sonar el teléfono sin parar porque hay miles de familias segovianas vinculadas a este colegio”, comentaba ayer. Pero la decisión está tomada y ya se ha hecho pública. El colegio “Jesuitinas”,— como se conoce al centro fundado por la Congregación de las Hijas de Jesús —cesará su actividad en septiembre de 2011, dejando atrás más de un siglo de vida educativa.
La congregación religiosa de las Hijas de Jesús ha informado que tras un periodo de estudio y reflexión sobre los distintos centros y servicios que tiene en España “ha convenido ceder la titularidad del colegio Sagrado Corazón a favor de los Misioneros Claretianos para su plena integración en el colegio Claret de Segovia con efectos del día 1 de septiembre de 2011.
La hermana Sagrario de Andrés ha explicado que después de llevar años buscando la mejor salida para los alumnos y profesores “ésta era la mejor alternativa; Es dolorosa, pero es la mejor porque queríamos un centro que tuviera un ideario religioso como el nuestro y en el Claret tendrán plaza nuestros profesores y alumnos que así lo quieran”. Así lo ha confirmado también el director de este colegio, Adolfo Lamata, quien ha indicado que disponen de espacios para en el caso de que fuera necesario acoger a las cerca 500 personas que pertenecen al centro “Jesuitinas”.
Según ha explicado la hermana Sagrario de Andrés, la congregación se ha visto obligada a determinar el cierre del colegio ya que su permanencia en el actual emplazamiento de la calle San Geroteo era “inviable” y de igual forma tampoco tenían posibilidades de buscar una nueva sede.
La ubicación en el recinto amurallado ha sido una de las principales causas de la ‘agonía’ de esta familia educativa, de acuerdo a las explicaciones de las religiosas que recuerdan el descenso de población escolar que se ha producido en el centro de la ciudad. Esta pérdida se ha visto compensada durante muchos años por los alumnos que llegan al colegio desde otros barrios de la ciudad, pero “el acceso a este centro cada vez se ha hecho más difícil y traer aquí los niños en coche, autobús o andando es una odisea” ha señalado con pena la directora que antes fue alumna del colegio segoviano. “Es mejor que nuestro alumnos vayan al colegio Claret —ha indicado la directora—que ir viendo como se vacían las aulas y se pierden unidades escolares”.
Otro argumento expuesto por las religiosas para explicar el próximo cierre de sus instalaciones en Segovia es la falta de religiosas jóvenes que puedan dar cumplimiento a la misión marcada por la fundadora de la congregación, madre Cándida, de propiciar la “educación católica de los pueblos”. Así las religiosas explican que se ha producido una “disminución sustancial” del número de integrantes de la congregación, que se une a la avanzada edad de las hermanas que actualmente mantienen los centros de las “Hijas de Jesús” y a la falta de vocaciones jóvenes.
Todos estos motivos han llevado a mantener “un diálogo responsable con los padres claretianos que patrocinan un proyecto educativo de Iglesia muy afín al nuestro”, señala en una nota informativa la congregación Hijas de Jesús, organización que asegura ha mantenido informada en todo momento de este proceso a Junta de Castilla y León y de forma especial a la Dirección Provincial de Educación.
Esta semana ha comenzado la comunicación del futuro cambio a los distintos estamentos de los dos colegios de forma paralela. Sagrario de Andrés asegura que la decisión ha sido expuesta a los enlaces sindicales, al claustro de profesores, a la directiva de la asociación de padres de alumnos y al consejo escolar. Ayer se remitieron las cartas a los padres de los alumnos y en el tercer trimestre escolar se celebrarán las reuniones y asambleas que sean necesarias para explicar los cambios que se avecinan en los próximos 18 meses.
Los directivos de los dos colegios aseguran que el presente curso concluirá con normalidad y el siguiente también se desarrollará sin grandes variaciones, aunque será un periodo de transición y adaptación hacia la integración. De hecho, en el próximo periodo de solicitud de plaza para el curso 2010/2011, el colegio “Jesuitina” solo ofertará 25 puestos para alumnos de primero de Educación Infantil, niños de tres años.
Adolfo Lamata ha explicado que este verano iniciarán las primeras obras de adaptación de espacios para acoger a los futuros miembros de su comunidad educativa, pensando que el centro Claret que ahora tiene tres líneas (tres grupos de alumnos por curso) pueda llegar a tener cuatro y a hacer desdobles de clase. El director del colegio Claret ha indicado que la integración impulsará una modernización de sus instalaciones que estaban demorando.
Lamata ha señalado que el cierre de un colegio siempre es una mala noticia y lamenta la situación en la que se encuentra el centro “Sagrado Corazón” pero asegura que procurarán realizar una “transición armónica” pensando en el bien de los alumnos y profesores.
El colegio Claret, que celebra el 125 aniversario de su fundación cuenta con 1.300 alumnos, 85 profesores y 20 trabajadores de administración y servicios. El colegio de las Hijas de Jesús tiene 466 alumnos matriculados y 39 profesores, incluidas las religiosas de la congregación.
