El entrenador del Real Madrid, José Mourinho, reveló ayer que se considera víctima de una campaña contra él y defendió el juego de su equipo, «construido en torno a un modelo, que es Cristiano».
El portugués, que fue entrevistado por una agencia de su país, explicó también que está decidido a no recurrir la sanción que le impuso la UEFA y precisó que ni él ni el club blanco pueden actuar ante un posible castigo a Ricardo Carvalho por abandonar la selección, aunque lamentó lo «injusto» de esa posibilidad.
Mourinho se mostró satisfecho por los fichajes realizados en el mercado estival y la estructura que dirige, planificada a 10 años, y confía en que el rendimiento sea bueno y no haya necesidad de acudir al mercado de jugadores en enero.
Para el entrenador, Cristiano Ronaldo es «un jugador absolutamente increíble, es un ala que ha trabajado en un contexto de equipo para poder llegar a determinadas zonas que le permiten hacer goles cuyo valor «no es comparable» a los tantos que marcan los delanteros natos.
Pero eso no significa, puntualizó, que el Real Madrid gire en torno a su compatriota, sino que «está construido en torno a un modelo, en el que Ronaldo, por sus características, es importante».
Con todo, Mourinho admitió que es un futbolista «difícil de dirigir durante el campeonato. Cuando quieres gestionar a alguien de este tipo en la plantilla ya sabes que su salida implica la entrada de otro jugador, que no es igual».
Sobre la campaña de la que se siente víctima, el luso señaló que «está bien organizada», pero es una gran motivación para seguir adelante en su carrera.
En relación con los incidentes en la Supercopa de España contra el Barcelona, lamentó que haya gente «que vive bien en la oscuridad», que se oculta y habla en los túneles, y otros que, como él, «no se esconden y actúan de modo que todos lo vean».
Las imágenes de televisión que llevaron a abrir el proceso en su contra «no muestran lo que se fue acumulando y fue contribuyendo» para el incidente, y además se queja de que «la prensa haya destacado las críticas que le hicieron».
Además, sobre la posibilidad de recurrir al Tribunal Arbitral del Deporte la decisión de la UEFA, que el pasado mes de julio redujo parcialmente la sanción impuesta en las semifinales de la pasada Champions, afirmó que está descartada.
«No recurro. Ya tuve una victoria que no esperaba, que significa mucho, mucho, mucho para mí».
Sin embargo, se quejó de que ese «no es un tribunal democrático, donde se pueda defender de un modo libre, equilibrado, en igualdad de circunstancias con quien acusa. Por eso nos quedamos aquí, me quedo con el placer de decir lo que dije», espetó.
Respecto a la pasada temporada, el preparador ‘merengue’ confesó que, pese a no haber ganado la Liga, consideró que fue «el mejor» de su carrera. «Fue el campeonato en que hice más puntos, en el que gané más veces, marcamos más goles, fue un torneo muy, muy, muy, muy bueno».
Mourinho no escondió ningún tema y también se refirió al caso sobre Ricardo Carvalho. Admitió que el Real Madrid no tiene garantías de que la selección portuguesa comunique su abandono a la UEFA y el jugador reciba una sanción que perjudique al club.
«Las leyes no son siempre correctas y para mí es incorrecto que una entidad sea penalizada por un problema que no es suyo. Los jugadores se van un día y vuelven una semana después, Carvalho es de Portugal, Benzema, de Francia…», recordó, y agregó que las relaciones entre Carvalho y Pepe son «óptimas, como siempre».
Sobre el rendimiento del equipo, el luso sostiene que «está mejor en muchos aspectos y tiene, de hecho, condiciones para hacer lo mejor que el año pasado».
Además, el cambio de la estructura directiva del equipo, de la que él forma parte ahora, tiene «poco» significado para él que, con todo, se muestra satisfecho de su autonomía.
En este contexto, el controvertido técnico resaltó la empatía «funcional y emocional» y la buena relación con el presidente del club Florentino Pérez y la cúpula directiva, y defendió las inversiones que ha hecho este verano. «Es un bloque muy joven, con jugadores que le permiten crecer, un Real Madrid para los próximos 10 años y no para dos temporadas».
Una de las novedades ha sido su compatriota Fabio Coentrao, a quién, recalcó, no han fichado solo por ser un buen lateral izquierdo, ya que cree que tienen en Marcelo «probablemente al mejor del mundo. Fue contratado porque nos da variadísimas opciones. Su riqueza es esa posibilidad de jugar en muchas posiciones y es un gusto tener jugadores así en la plantilla», sentenció.
