Acierto representó en su momento, no hace mucho todavía, la sustituciónde la imagen de la Virgen que durante siglos había presidido la hornacina de la cara occidental del Acueducto. Lógicamente, la muy antigua escultura estaba destinada a un museo; y al Gobierno Municipal se le ocurrió que el mejor sería el de la Casa de la Moneda donde está instalado un llamado Centro de Interpretación del monumento. Desde un principio me pareció inadecuada la ubicación, pues más hubiera encajado en el Museo Provincial, donde se encuentran los escasos restos que se conservan de la imagen de San Sebastián, que estuvo colocada en la hornacina de la cara oriental…Pero como este museo no es responsabilidad municipal, se optó por el otro. También pudo haber sido colocada en el santuario de la Virgen de la Fuencisla (aunque algunos, equivocadamente, la han confundido con ésta), donde sólo lo espiritual la comparaba con la Patrona de nuestra Tierra; desde luego, allí habría sido más visitada que en la Casa de la Moneda.
Cuando los responsables del gobierno municipal anunciaron a bombo y platillo que se iba a preparar un Centro de Interpretación del Acueducto en el lado oriental del mismo, de inmediato me incliné porque este lugar sería el más adecuado para recibir la imagen. Incluso podría pensarse también, previas las oportunas gestiones y tratos, incorporar a él los indicados escasos restos de la imagen de San Sebastián. Pero esto, claro está, si el pretendido y anunciado centro cuenta con la garantía de seguridad necesaria y adecuada…Y si un día llega a ser realidad, porque los planes y promesas municipales, no son de mucho fiar, como se está comprobando. Más ‘globos sonda’ y más fotos publicitarias con ‘presencia oficial’. Todo lo que digo suponiendo también que el proyecto no quede en la colocación ‘de una nueva medalla al mérito’.
Ahora tenemos otro problema, y es que el Ayuntamiento ejecuta excesivamente lentos todos sus proyectos (excepto, claro está, los de ‘sus niñas bonitas’, el Centro de Creación La Cárcel, la Casa de la Moneda y el propio CAT).
Ya ha pasado largo tiempo desde el anuncio de construcción del nuevo Centro y todavía no se observa ‘movimiento alguno’ sobre el tema, y raro será que también ahora no se demore la instalación ‘sine día’.
Siempre ha sido un contrasentido que el llamado Centro de Interpretación del Acueducto esté a dos kilómetros del mismo monumento, cuando en todas estas instalaciones se persigue que se sitúen en el mismo hábitat del edificio o espacio concreto que se trate.
Imagino que estas palabras tan bien intencionadas no tendrán mucha importancia en las conciencias de los máximos responsables políticos de la ciudad, pero también es cierto que mi conciencia y sentido de la responsabilidad ciudadana me obliga a dejarlas impresas en estas páginas, donde pueden servir de recordatorio en tiempos posteriores a través de la hemeroteca del periódico.
Claro que tampoco se ha vuelto a saber nada nuevo del asimismo pretendido Estatuto de Protección y Seguridad del Acueducto, o como en su día, si llega, pueda llamarse. Aunque de vez en vez se suelte una especie de recordatorio de que se ‘está sobre el tema’. Y el tiempo, o sea, los meses, pasan sin demora. Y los grandes proyectos municipales de futuro se vienen limitando a cambios de añejas tuberías, arreglo de aceras y algunos parches en calles que lo reclaman a gritos…Aunque luego todo el pavimento quede tan horroroso como el de la calle de San Agustín, después de haber sido ‘renovado’ completamente en fecha todavía cercana.
Ante el panorama, habrá que echarse las manos a la cabeza pensando en una nueva legislatura.
