El Servicio Territorial de Medio Ambiente de la Junta en Segovia ha informado que el pasado viernes día 9 de julio se produjo una “mortandad anómala” en el tendido eléctrico, propiedad de la compañía Naturgy (Unión Fenosa), existente en Campo Azálvaro, paralelo a la carretera SG-500, vía que conecta el municipio de El Espinar con la provincia de Ávila, que se repitió el domingo. En total, se investiga la muerte de 29 cigüeñas y un buitre leonado.
Una vez avisados los agentes medioambientales de la Junta y los agentes forestales del Ayuntamiento de El Espinar se personaron en la zona, constatando la existencia de varios cadáveres de cigüeña blanca con sintomatología coincidente con electrocución y repartidos en varias torres. Se procedió a iniciar los trabajos de investigación y retirada protocolarizada de los cadáveres.
El domingo 11 se vuelve a producir otro incidente similar con otro número elevado de muertes por lo que se instó desde el Servicio Territorial a los técnicos de dicha línea eléctrica a personarse en el lugar de los hechos para investigar la muerte en total de 29 cigüeñas y un buitre en una línea “en aparente buen estado de conservación y protección”.
Según remarcó la Delegación Territorial de la Junta en Segovia, los servicios forestales continúan con los trabajos y vigilancia en todo el tendido con el fin de evitar que se vuelvan a repetir los mencionados incidentes.
El espacio de grandes pastizales de la comarca de Campo Azálvaro, espacio natural protegido por la Red Natura 2000 como zona especial de conservación y zona de Especial Protección para las Aves, destaca como zona de alimentación para una rica comunidad de aves a lo largo de todo el año, algunas de las cuales nidifican en los límites del espacio protegido y sus alrededores, así como zona adecuada de descanso y alimentación durante el periplo migratorio de aves tanto ibéricas como de ejemplares procedentes de otras latitudes más norteñas. Destaca principalmente la población nidificante de cigüeña común (100 parejas reproductoras) con importancia internacional, así como las concentraciones premigratorias con agrupaciones superiores a los 500 ejemplares.

Los expertos opinan
Esta densidad de aves en dispersión, con una línea eléctrica de alta tensión y que parte de sus apoyos no cumple con las especificaciones técnicas del Real Decreto 1432/2008 para la protección de la avifauna contra la colisión y electrocución, y que a su vez cuenta con antecedentes por accidentes por electrocución, sumado a que es una zona llana sin arbolado, con una elevada densidad de comida, ha provocado uno de los episodios de electrocución más dramáticos de la provincia de Segovia, con la muerte de 29 cigüeñas blancas y un buitre leonado, que se sumarían a otras siete cigüeñas blancas muertas por electrocución en el mismo espacio protegido en la provincia de Ávila, y localizadas estas últimas por el Colectivo Azálvaro”, explican.
“Las aves gregarias aumentan el riesgo de electrocución al posarse en grupo en los apoyos de las líneas eléctricas, lo que posiblemente ha provocado este episodio masivo de electrocución de cigüeñas blancas, al producir un arco eléctrico por tocar con dos fases eléctricas al mismo tiempo y tener un contacto letal entre varias aves”, explica el presidente de la ONG, José Aguilera.
Un punto negro

No es la primera vez que este tendido provoca la muerte de aves. Hay que recordar que, en la misma línea eléctrica de titularidad de Naturgy (Unión Fenosa), el pasado mes de noviembre de 2020, se produjo la localización de tres ejemplares de milano real, especie catalogada en España como en peligro de extinción, muertos por electrocución en el tendido eléctrico, a su paso por el término municipal de El Espinar.
El Colectivo Azálvaro denunció ante el Servicio Territorial de Medio Ambiente de Segovia la aparición de los cadáveres, poniendo la situación en conocimiento de los agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León que se personaron en el lugar para dar fe de lo sucedido y tomar las medidas oportunas.
Casi siete meses después de que saltara la noticia y a raíz de las reclamaciones y denuncias de las asociaciones la situación es bien distinta. Tras el trabajo coordinado de los agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León, y el guarda rural de la ONG Colectivo Azálvaro, la distribuidora de energía eléctrica Naturgy ha actuado con la corrección de parte del tendido eléctrico con más de 10 apoyos, y con las medidas necesarias para la protección de la avifauna contra la colisión y electrocución.
Durante las últimas semanas varios operarios han trabajado en la zona para adecuar los postes y los tendidos a la normativa vigente, con el objetivo de reducir el riesgo de colisión de aves con una adecuada señalización. En estos meses se produce el segado de la hierba de la mayoría de fincas lo que provoca grandes concentraciones de cigüeña común que acuden en busca de alimento. Estos animales buscan cobijo en las copas de los árboles que al no existir se posan sobre los tendidos con el peligro que esto conlleva.
