Las buenas noticias parecen acercarse a Barcelona en una semana con bastantes compromisos para los azulgrana, tanto el Liga como en competición europea.
Si el pasado miércoles Zlatan Ibrahimovic conseguía reconciliarse con la afición ‘culé’ al marcar el primer gol de su equipo ante Osasuna y comenzar la remontada catalana, después de más de una hora de partido en la que los navarros pusieron al Barça entre las cuerdas, ayer la buena noticia venía en los entrenamientos. El centrocampista Xavi Hernández, ausente en los últimos encuentros a causa de una lesión muscular, empezó a participar mínimamente en la preparación física del conjunto de Guardiola.
Después de nueve días de baja -el 16 de marzó notó molestias en el sóleo de la pierna derecha y los médicos determinaron que estaría fuera del equipo-, el hecho de que se pudiera ejercitar con sus compañeros da optimismo a la plantilla, más teniendo en cuenta que el centro del campo sin el de Terrasa está más incontrolado, pese a la buena labor de Andrés Iniesta. Así, las sensaciones son buenas y se prevé que el catalán pueda volver al once inicial la próxima semana, en el partido de ida de los cuartos de final de la ‘Champions’ ante el Arsenal.
Además de Xavi Hernández, otro de los jugadores con problemas físicos, Gerard Piqué, también se ejercitó ayer con balón durante unos minutos con el resto del grupo. El central tuvo que ser sustituido durante el partido del pasado domingo contra el Zaragoza y no pudo entrar en la convocatoria del miércoles frente a Osasuna.
En la sesión de entrenamiento, que fue de recuperación para los titulares que jugaron ante los navarros, participaron 22 jugadores, cuatro de ellos del filial: Dalmau, Jonathan dos Santos, Miño y Espinosa, mientras que los centrocampistas Seydou Keita y Yaya Touré no se han ejercitado con balón.
«Le ha costado»
Por otro lado, el lateral Maxwell aseguró que su amigo y compañero Zlatan Ibrahimovic, con quien llegó este verano procedente del Inter de Milán tras coincidir también en el Ajax de Ámsterdam, estaba «enfadado» con él mismo por su falta de gol y no con el equipo o la afición.
«Enfadado con todos no, con él mismo sí, porque un delantero siempre quiere marcar», aseguró el lateral sobre el estado anímico del ariete sueco. «Le ha costado unos cuantos partidos, pero esto pasa con todos. Ahora está bien, haciendo goles, y con los movimientos que tiene que hacer», añadió al respecto. Por ello, Maxwell aseguró que «siempre» estará al lado de ‘Ibra’ como amigo y compañero de equipo, es decir, ayudándole en el terreno de juego intentando generar ocasiones, como la de ayer, para que el sueco «continúe marcando».
Así, sobre su asistencia en el partido del miércoles, destacó que para él fue un «privilegio». «Me quedé muy feliz por darle esa asistencia. Así continúa haciendo goles, que es muy importante. Estamos muy felices por cómo el grupo le está ayudando. Tiene la confianza de todos y esto nos da mucha alegría», aseveró.
En cuanto al partido, que el Barça resolvió en la segunda parte con dos goles pese a un mal primer tiempo, desveló que fue la charla de Guardiola al descanso lo que les hizo ganar el encuentro. «Nos mostró muchas cosas que teníamos que mejorar tácticamente. También de la actitud del primer tiempo, que estábamos no muy intensos, y nos costó mucho. Cambiamos la actitud, y luchamos por todos los balones y esto nos dio la victoria», subrayó.
Precisamente, sobre esta falta de intensidad que señaló el técnico, Maxwell aseguró que no es «cuestión de querer o no». «A veces no hacemos lo que tenemos que hacer simple, y los equipos nos lo hacen también difícil porque se meten muy atrás o presionan arriba. Hay tiempo para mejorar y lo importante es siempre querer hacer las cosas bien», apuntó.
