La Plaza de la Morería ya no tiene quiosco. La estructura ubicada en el centro de este espacio ha sido reemplazada por un nuevo diseño fruto de la intervención integral que ha cambiado diametralmente su aspecto y que desde ayer pueden disfrutar los vecinos del barrio de San Millán y todos los segovianos.
Si bien es cierto que el quiosco –que junto a la pirámide que el colectivo artístico Boa Mistura coloreó en 2017- era uno de los elementos constructivos más singulares del barrio, no es menos cierto que el diseño del arquitecto Alberto López Estebaranz ha transformado este espacio en un cruce de caminos al que se llega a través de los espacios ajardinados a los que dan vida las plantas de Viveros El Ejidillo, que han cambiado el duro pavimento de su anterior configuración por una propuesta más amable y sostenible para los ciudadanos.
La alcaldesa Clara Luquero y la presidenta de la Asociación de Vecinos de San Millán Francisca Boal, presentaron ante los vecinos del barrio la nueva configuración realizada tras la intervención integral en los 3.000 metros cuadrados del espacio, donde se han invertido cerca de 350.000 euros.
El proyecto ha servido para mejorar y ordenar los servicios públicos de alumbrado y electricidad que existían en el subsuelo de la plaza y se han reorganizado los espacios generando amplias zonas, más cálidas en contraste con la frialdad urbanística que presentaba hasta ahora. Además, se ha nivelado la plaza para hacerla completamente accesible; y se le ha dotado de iluminación y mobiliario urbano adecuado, buscando en todo momento generar una zona estancial y de paso fluido.
La intervención se ha completado con la mejora paisajística vegetal del entorno. Se ha sustituido la parte de vegetación que existía y se han preparado nuevos parterres verdes, que incorporan zona de descanso, como un banco corrido a la altura de las personas, que invita a disfrutar del espacio.
Cada parterre representa y lleva el nombre de uno de los sexmos que integran la Comunidad de Ciudad y Tierra de Segovia, dando así, de forma simbólica, una visión global a la plaza a través de esta unidad administrativa; y el parterre central lleva el nombre de sexmo de San Millán, sexmo central de la Comunidad.
La alcaldesa puso de manifiesto el esfuerzo realizado en esta intervención, que ha permitido ofrecer “un entorno urbano mucho más amable, en el que una vez eliminado el pavimento, se ha ganado para disfrute de la ciudadanía un 50% de la plaza”.
Por su parte, Francisca Cubo resaltó el éxito del trabajo realizado por el Ayuntamiento y el buen resultado de la obra, pero sin olvidar el antiguo quiosco.
