Los vecinos de La Fuentecilla y la comunidad educativa del CEIP ‘Carlos de Lecea’ respiran aliviados al ver las máquinas trabajar ya en el inicio de las obras de consolidación del talud situado junto al centro educativo, que en los últimos años suponía una amenaza latente de desprendimiento, concretada ya en alguna ocasión. La intervención de forma subsidiaria del Ayuntamiento en los cerca de 300 metros lineales entre la calle Murillo y la cabecera del valle de Tejadilla se desarrollará en los próximos cuatro meses, con una inversión cercana a los 300.000 euros.
El Ayuntamiento pone fin de esta manera a la incertidumbre sobre esta zona, tras agotar todos los plazos administrativos para exigir a la propiedad la realización de estas obras que ahora se hacen con cargo a los presupuestos municipales. Al no localizarse de forma efectiva a los propietarios, el Ayuntamiento no sólo realizará las obras, sino que una vez finalizadas resolverá la parte jurídica adquiriendo los terrenos en la forma que sea más conveniente para los intereses municipales, según explicó ayer la concejala de Urbanismo Clara Martín, que junto al edil de Obras, Miguel Merino, y la alcaldesa, Clara Luquero, visitaron las obras junto a responsables de la asociación de vecinos y del centro educativo.
El proyecto a ejecutar prevé rebajar la pendiente del talud, desmotando la coronación y usando ese material para terraplenar el pie del mismo, dando como resultado un perfil plano. Además, se asegurará mediante hidrosiembra, la construcción de una cuneta de guarda en la coronación del talud y una serie de bajantes para evacuar el agua que recoja.
La alcaldesa señaló que el objetivo prioritario es garantizar la seguridad de la comunidad educativa del CEIP Carlos de Lecea, una vez que se ha comprobado la existencia real de riesgo para el centro de enseñanza , concretado en el año 2018 donde el talud registró un importante desprendimiento.
Además, recordó que las obras contarán con la colaboración de la Junta de Castilla y León, que hace pocas semanas comprometió a través de la Consejería de Educación una ayuda de 150.000 euros que, aunque no irá directamente a este proyecto, servirá para invertir a mayores en la mejora de los centros de educación infantil y primaria de la capital.
Los vecinos de La Fuentecilla expresaron su satisfacción por el inicio de las obras, que en palabras del tesorero de la asociación Javier Martín eran “muy necesarias” en un entorno especialmente sensible. Así, señaló que “es algo que tenía que haberse hecho hace ya tiempo, pero la burocracia impide la rapidez en este tipo de procesos, y a la vez que se exige a las administraciones rapidez, también hay que pedir a los particulares que cumplan con sus obligaciones”.
