Al presidente provincial del PP, Francisco Vázquez le cuesta madurar sus decisiones. Lo dicen quienes más le conocen. Desde que la portavoz municipal del PP, Beatriz Escudero, optó, de motu propio, por relegar del grupo popular a tres concejales —Elena García, César Martín y Mercedes Álvarez-Campana— por romper la disciplina de voto en el último pleno, Vázquez no ha parado de pulsar opiniones. Y lo ha hecho con absoluta discreción, sotto voce, con la mesura que exige afrontar una crisis de consecuencias imprevisibles. Esta ‘preocupado’, como él mismo ha confesado. Pero no es su estilo tomar decisiones ‘en caliente’ y tras hablar con cada uno de los implicados, ha hecho lo propio con la dirección del PP de Castilla y León. Y hoy mismo lo hará con destacados dirigentes nacionales del partido. A Vázquez el cuerpo le pide ‘cambios’, pero su decisión para sortear la crisis, que se produce a diez meses de las elecciones municipales, no la alumbrará hasta finales de este mes, en la reunión del Comité Ejecutivo del PP.
Vázquez no quiere trasladar una propuesta al Comité Ejecutivo que divida aún más al PP. A raíz de los episodios de indisciplina, la división en el PP es un hecho; entre los partidarios de Escudero, y quienes apoyan a los ‘rebeldes’, algunos con responsabilidad en los órganos de dirección del partido. Y según aseguran fuentes del PP consultadas por este diario, la corriente crítica con la gestión de Escudero va en aumento. Les chirría la oposición de enfrentamiento contínuo que ejerce la senadora, con el aliento de un par de concejales —Susana Moreno y Miguel Ángel Antona—. Y con la estrategia de “al enemigo ni agua”, que popularizo el entrenador de fútbol argentino Carlos Bilardo; esa por la que Escudero prohibió a los concejales del PP que tomaran un vino o un café con los ediles socialistas, según ha llegado a desvelar estos días una de las concejalas acusadas de deslealtad, Elena García.
Vázquez sabe que no puede pasar por alto la indisciplina. Pero también que son muchas las voces que consideran que Escudero ha sido ‘profundamente injusta’ por culpabilizar a tres concejales de dos votos en blanco ‘sin pruebas’. Toca ejercer de Rey Salomón y adoptar una decisión que no satisface por completo a ninguna de las dos partes, pero que sea la única posible.
Vázquez tiene claro que debe tomar una decisión ‘ejemplarizante’ contra los concejales ‘díscolos’, que ya han puesto a disposición del presidente provincial del PP sus cargos en los órganos de dirección del partido. Vázquez y el secretario provincial, Miguel Ángel de Vicente, estudian proponer al Comité Ejecutivo del PP la baja como afiliados del partido de los tres concejales. No obstante, son conscientes, según las mismas fuentes, que son personas ‘muy válidas’, que han demostrado trabajo y lealtad, que cuentan con el respaldo y comprensión de afiliados y simpatizantes, y que no pueden prescindir de ellos. ¿Como aplicar una sanción ejemplar contra unas personas de las que no se quiere prescindir?. Esa es la disyuntiva y el quebradero de cabeza de Vázquez.
Una opción es que, a propuesta del presidente, el Comité Ejecutivo decida la suspensión temporal de militancia de los tres ‘insurrectos’. Sin carnet del PP, aunque sea temporalmente, García, Martín y Álvarez-Campana, podrían solicitar al alcalde, Pedro Arahuetes, la creación de un Grupo Mixto, que operaría con lealtad al PP de Segovia, aunque no tanto con fidelidad ciega hacia Escudero.
GRUPO MIXTO
Tras la decisión unilateral de la portavoz, los tres ediles ‘apartados’ no pueden presentar mociones ni preguntas escritas al pleno. Cobijados en un Grupo Mixto, que recibiría la correspondiente asignación de las arcas municipales para su funcionamiento, los ‘rebeldes’ recuperarían su representación en las comisiones, y lo harían en detrimento del grupo popular, que seguiría encabezando Escudero.
Pero también cabe la posibilidad, menos probable, de que Vázquez mire para otro lado y no plantee la expulsión del PP de los ‘insurrectos’, ni siquiera temporal. Hasta el fin del actual mandato municipal, quedarían una decena de sesiones plenarias donde los tres ediles ‘apartados’ vivirían una situación demasiado incómoda. ¿Cómo asistir a un pleno sin haber participado antes del análisis de los asuntos de debate en las comisiones, donde, por decisión de Escudero, ya no pueden asistir?. Todo apunta a que si el PP no les da de baja y les impide formar el Grupo Mixto, Elena García, César Martín y Mercedes Álvarez -Campana, renunciarán a su acta como concejales y saldrán del Ayuntamiento. Escudero podrá así incorporar al grupo a las tres personas siguientes en la lista del PP que encabezó en las últimas municipales.
