Las diferencias en las tasas que abonan los alumnos para presentarse a las pruebas de acceso a la Universidad (EBAU) pueden duplicarse en función de la comunidad autónoma donde residan, con más de cien euros en Castilla y León, entre las más altas del conjunto autonómico, ha denunciado este miércoles la Confederación Estatal de Asociaciones de Estudiantes (CANAE), que reclama su gratuidad.
Tras conocerse que un instituto de Móstoles (Madrid) inició hace unas semanas una colecta entre sus profesores para recaudar fondos que ayudaran a afrontar ese gasto a alumnos sin recursos, la presidenta de CANAE, Andrea G. Henry, ha señalado que si se siguen «poniendo trabas y obstáculos, mucha gente se quedará por el camino. Estas tasas deben ser gratuitas, es un examen que sí o sí tenemos que hacer para ir a la Universidad».
Ha censurado asimismo la falta de mecanismos y ayudas específicas que permitan afrontar el pago de esas tasas para las personas que tengan más dificultades, y exige a las administraciones públicas la puesta en marcha de medidas para combatir estas desigualdades.
En palabras de la presidenta de CANAE, «la mayoría de estudiantes no saben que tienen que pagar estas tasas hasta semanas antes de la realización de las pruebas. Es una sorpresa para muchas familias. Y estas no son las únicas tasas, cuando tenemos que recoger nuestro título académico también se nos cobra, entre otras cosas».
Denuncia asimismo la brecha existente entre unas comunidades autónomas y otras, llegando incluso a triplicarse el precio de estas pruebas en función del territorio en el que se realicen. Un estudiante de la Comunidad de Madrid deberá pagar más de cien euros, mientras que en La Rioja, la mitad.
