El CD La Granja escapó ayer de la espada de Damocles del coronavirus. Tras dos casos positivos que suspendieron el entrenamiento del martes, el club volvió a realiza las pruebas sin nuevos sustos. Así las cosas, el club segoviano entrenó al atardecer y recibirá hoy (17:00 horas) a La Bañeza en El Hospital en un duelo fronterizo por la salvación entre leoneses, que marcan ahora la permanencia, y sus anfitriones, que ahora mismo descenderían.
El Covid truncó una de las semanas más importantes de la temporada. “En el entrenamiento del martes queríamos trabajar aspectos muy importantes del partido. Ahora estamos casi más pendientes de que estén todos los chicos bien que de otra cosa. Lo que tengo claro es que los que estén, van a salir a ganar y van a competir con todas las garantías”, subraya su entrenador, Ricardo de Andés.
Tras dos partidos aplazados, un tercero elevaría la congestión del calendario. “Nosotros queremos jugar. Siempre que se pueda y que no sea un riesgo”. Los dos positivos del martes viajaban juntos en el mismo coche; las medidas preventivas han evitado que se extienda.
La Granja viene de empatar ante el Salamanca B. “Seguramente es el mejor partido que hemos hecho fuera de casa; concediendo muy poco, generando dos o tres ocasiones bastante claras e incomodando a un equipo que venía de hacer siete goles en dos partidos. Estamos contentos y queremos refrendar ese punto con los tres ante La Bañeza”.
Ricardo espera un rival que compite bien, fuerte en estrategia y apuesta por un buen trato de balón. “Es uno de los equipos más competitivos del otro grupo. Es verdad que no ha empezado con buen pie esta fase, pero ha recuperado jugadores importantes y el otro día ya ganó con solvencia. Espero un rival duro, pero confío en que podamos hacer buen partido”.
Con todo, Ricardo relativiza. “El que gane da un paso adelante, pero quedan ocho partidos. Ganar a La Bañeza y perder los siguientes tres partidos no te soluciona nada. Y al contrario. No es una final”.
