Diez jornadas restan para que la Liga Sacyr Asobal toque a su fin, y el Viveros Herol Nava continúa trabajando para salir de las posiciones de descenso a División de Honor Plata, ofreciendo mejores sensaciones que en semanas precedentes, pero todavía con mucha necesidad de puntos.
“Nosotros somos los que somos, y cuando estás ahí abajo muchas veces te tiembla la mano”, afirmó Zupo al terminar el partido ante el Bidasoa Irún, en el que el equipo dejó tan buenas sensaciones al técnico que no dudó en afirma que “si mantenemos el nivel que hemos mostrado en Valladolid y ante Irún, vamos a ganar muchos partidos, porque esto es un refuerzo positivo”.
Subiendo el nivel
Varios son los jugadores que han dado un paso adelante para conseguir sacar al equipo navero de la situación en la que se encuentra. El primero de ellos es Dzmitry Patotski, que ya mostró un buen nivel frente al FC Barcelona, con sus intervenciones en Valladolid puso mucho de su parte para que se ganara el partido, y sujetó todo lo que pudo al equipo frente al Bidasoa, con un buen porcentaje de paradas en la primera parte.
Además, la defensa ha elevado su nivel, con las aportaciones de los habituales en el 6:0, pero también con la recuperación tanto de Adrián Rosales como de Filip Vujovic, que jugando en el ‘dos’ echan una buena mano en las basculaciones ayudando al extremo, ya que los rivales suelen comenzar sus ataques colocando al pivote en esas zonas entre extremo y lateral.
En ataque, Rodrigo Pérez Arce jamás elude la responsabilidad y sigue marcando goles, pero ahora con una mejor selección en los lanzamientos. Y ello es posible gracias al aporte ofensivo de otros compañeros, como Darío Ajo, o Jorge Silva, que sin estar todavía al gran nivel que exhibió en campañas anteriores, sí está mostrándose más incisivo en sus lanzamientos, ayudado también por una mejor circulación en ataque, con ya que tanto Mota como Carlos Villagrán están dirigiendo con más acierto.
La aportación de la defensa y las intervenciones de Dzmitry Patotski, claves para la mejoría del equipo
“El buen juego nos ha hecho quitarnos un poco de esa presión añadida en ataque, con partidos en los que habíamos hecho muy mal las cosas, con muchas pérdidas de balón”, afirmó el entrenador navero, al que no le tiembla el pulso a la hora de dar minutos a jugadores como Pablo Herranz “que está trabajando bien y aprovecha sus oportunidades” para dar descansos a Darío, o al propio Andrés Alonso, más centrado en la defensa que en el ataque.
Aún hay aspectos que mejorar en el equipo, y jugadores a los que ‘recuperar’ para la causa. Zupo puso sus ojos en la portería “porque a Yeray le está costando un poco volver después de la lesión”. Además, Lukas Simenas está participando mucho menos en los partidos, quizá para liberarle un tanto de la presión que parecía caer bajo sus hombros cuando es prácticamente un recién llegado de la liga lituana.
Lo que viene
Ahora le llega al Viveros Herol una terna de partidos, en Benidorm, frente a Cisne en Nava y en la cancha del Villa de Aranda “que va a marcar de manera definitiva nuestro devenir en la temporada. Si jugamos como lo hemos hecho, ganaremos bastantes puntos” afirmó Zupo.
El primer desplazamiento hasta la cancha del Benidorm se producirá el próximo fin de semana, con el Viveros Herol visitando a un equipo que acumula tres derrotas consecutivas que le han dejado en tierra de nadie, sin demasiadas posibilidades por arriba, y con pocas opciones de pasar por apuros por abajo. Es uno de esos equipos que puede ‘dejarse ir’ hasta el final de la temporada.
Los otros dos encuentros para el Balonmano Nava tendrán como protagonistas a los dos conjuntos que le persiguen en la clasificación, Cisne y Villa de Aranda. Serán encuentros que habrá que ganar ‘sí o sí’ con el doble objetivo de dejar a gallegos y ribereños definitivamente hundidos en la clasificación, y sumar los puntos necesarios para poder salir de las posiciones de descenso. Sin duda, las tres próximas semanas serán de lo más importantes para el futuro del conjunto de Nava de la Asunción.
