El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, intervino este martes a las 17.00 horas en un rueda de prensa telemática de forma excepcional ante la decisión del Tribunal Supremo de la anulación del toque de queda a las 20.00 horas en la Comunidad, en la que aclaró que «asumimos la decisión del Tribunal Supremo».
«El esfuerzo de todos los ciudadanos de la Comunidad ha tenido recompensa: los contagios están bajando»
«Hemos sido garantes con el Estado de Derecho», aseguró el presidente autonómico, que se mostró satisfecho por la reducción del número de positivos por Covid-19 en relación al adelantamiento del toque de queda: «Desde el punto de vista sanitario, ha sido favorable. El esfuerzo de todos los ciudadanos de la Comunidad ha tenido recompensa: los contagios están bajando».
Tras la decisión del Supremo, el nuevo toque de queda fijado entre las 22.00 horas y las 6.00. Así lo confirmó el presidente, que explicó además que se llevó a cabo un Consejo de Gobierno extraordinario en el que se fijó el horario máximo, a las 20.00, para establecimientos. «A partir de las 20.00 horas no podrá estar abierto ningún establecimiento que no se considere esencial». De esta manera, tendrán que cerrar a dicha hora la hostelería y los centros culturales.
Por otro lado, el resto de medidas se mantienen, de momento, hasta el 23 de febrero y, llegados a ese fecha, se valorará «la evolución de la incidencia acumulada y el criterio de la hospitalización» para tomar nuevas decisiones, que si siguen mejorando podrían aliviar o levantar ciertas restricciones.
Sanciones interpuestas
Respecto a las sanciones interpuestas por las Fuerzas de Seguridad en relación al incumplimiento del horario del toque de queda durante este último mes, el presidente de Castilla y León calificó que es una situación «compleja» y que deberán estudiar los «servicios jurídicos si se tramitan o quedan en ‘stand by'».
Posible oleada de reclamaciones
Ante la posible oleada de demandas y reclamaciones económicas por el adelantamiento del toque de queda el 15 de enero, Mañueco es consciente de que puede producirse, pero pidió talante y consideración en las formas. «Nosotros actuamos con responsabilidad con la intenciones de proteger a las personas de Castilla y León y, por eso, pedimos tranquilidad».
