El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha pedido este viernes al Gobierno de la Nación un «cambio de rumbo» en su estrategia de contención de la tercera ola de la pandemia y que «mueva ficha«, con un decálogo de peticiones al Ejecutivo central que incluye medidas como la posibilidad de imponer un confinamiento domiciliario, pautas comunes o la convocatoria de una nueva Conferencia de Presidentes Autonómicos.
Fernández Mañueco ha comparecido en la mañana de este viernes, a petición propia, ante el Pleno de las Cortes de Castilla y León para informar sobre la situación de la COVID-19 en la Comunidad, donde ha cargado contra la «falta de coordinación» del Ejecutivo central y ha asegurado que ambos gobiernos no son «competidores o antagonistas», sino que deben avanzar en una «dirección unificada».
El presidente de la Junta ha resaltado algunas de las medidas tomadas por su Gobierno para hacer frente al vertiginoso aumento de los casos en las pasadas semanas, y que ya aminora su ritmo de contagio con «un ligero descenso» en las últimas actualizaciones de la Consejería de Sanidad. Aún así, ha insistido en la necesidad de que el Gobierno central dote al Ejecutivo regional de nuevas herramientas jurídicas, en concreto para decretar confinamientos domiciliarios en zonas con mayores incidencias, por lo que ha reclamado al Gobierno que «asuma su liderazgo y apueste por una coordinación efectiva con las Comunidades Autónomas«.
El decálogo planteado por Fernández Mañueco incluye los siguientes puntos:
- Actualizar los criterios comunes del acuerdo del 22 de octubre del Consejo Interterritorial de Salud. El actual cuadro de niveles, conocido como semáforo, deja arbitrariedad por encima del umbral de 250 de incidencia acumulada.
Sería oportuno establecer otros umbrales con medidas comunes para elevadas tasas de incidencia, incluida la posibilidad de un confinamiento total o selectivo en municipios, provincias o comunidades autónomas con una especial incidencia.
- Una herramienta jurídica, intermedia entre el estado de alarma y la actual normativa sanitaria, que está desfasada, para actuar con eficacia desde las comunidades autónomas.
- Incrementar la distribución de dosis de vacunas para acelerar el ritmo de vacunación y garantizar un calendario. Solicitamos al Gobierno que utilice todas las herramientas a su alcance para hacer cumplir los contratos de suministro. Tiene nuestro apoyo ante la Unión Europea y la industria farmacéutica.
- Establecimiento de pautas comunes en materia profesionales sanitarios para todos los servicios de salud públicos del sistema nacional.
- Agilización de los procesos de homologación de títulos de medicina y especialidades de terceros países para facilitar la contratación de profesionales.
- El aumento de las plazas de formación de especialistas en las próximas convocatorias previstas.
- Aprobar un paquete económico adicional para ayudar a los sectores más afectados, como el comercio, el turismo o la hostelería. Como hemos hecho en Castilla y León.
- Replantear el reparto de los fondos europeos. Debe convocar el Consejo de Política Fiscal y Financiera, consultar a las comunidades autónomas y reconsiderar el reparto, que es desequilibrado e injusto, especialmente con Castilla y León.
- Aplicar el IVA reducido a todo tipo de mascarillas homologadas. Es algo que le pedimos desde el mes de abril, cuando nos sumamos a la petición del presidente de la Xunta en Conferencia de Presidentes.
- Convocar una Conferencia de Presidentes en la que abordar estas cuestiones con el máximo ánimo de coordinación.
