“A nadie le gusta que su pueblo sea conocido por una noticia como ésta”, afirmaba resignado este sábado el alcalde de San Pedro de Gaíllos, Juan Carlos Montero, tras conocer que el municipio será el único de la provincia de Segovia que tendrá que someterse a las nuevas restricciones desde este domingo a las 18.00 horas.
Y todo, probablemente, por la celebración hace unos días de un cumpleaños en el que se reunieron más personas de las que autoriza el protocolo Covid-19, que deja en la actualidad a unas quince en cuarentena. La incidencia de los contagios se ha elevado en los últimos días en San Pedro de Gaíllos, lo que conlleva que en los próximos siete días, de momento, los cerca de 300 vecinos de esta pequeña localidad tendrán más limitaciones en su día a día.
A pesar de las circunstancias, el alcalde explicaba ayer, sábado, que las medidas excepcionales que anunció la Junta para 53 municipios de la Comunidad no influirá en San Pedro de Gaíllos, ya que los bares de la localidad ya se encontraban cerrados, salvo el del centro cultural del barrio de Rebollar, que mantenía abierta la terraza.
La “tienda” del pueblo estaba también cerrada, “pero si abre, será hasta las seis de la tarde”. Las actividades del Centro de Interpretación del Folklore y del Museo del Paloteo también estaban aplazadas, así que no les afectarán las nuevas medidas.
El alcalde mostraba su satisfacción, al menos, porque la residencia de ancianos sigue a cero de contagios, y la semana que viene recibirán la segunda dosis de la vacuna.
