El capitán de la Guardia Civil, J.C.O., que estuvo desaparecido durante dos días, sigue ingresado en un centro hospitalario de Madrid. Allí lo encontraron sus compañeros el pasado miércoles. Tras su localización, los agentes le trasladaron a un hospital de la capital madrileña, donde todavía permanece en observación.
Como cada día, J.C.O. salió de su domicilio en Santa María la Real de Nieva el lunes 25 para acudir a su trabajo en Madrid, donde está destinado en la Unidad Central Operativa del Medio Ambiente (UCOMA). Ahora participaba en un curso de formación, pero al no llegar a la clase, telefonearon a su domicilio para interesarse por él. Se inició entonces un operativo para intentar localizarlo. Al parecer se había dejado el teléfono móvil en casa, aunque sí se llevó el arma reglamentaria.
Dos días después, el miércoles, algunos compañeros de la Benemérita dieron con él en Madrid, que le retiraron el arma corta que llevaba y lo trasladaron a un centro sanitario para ser sometido a una revisión.
La noticia de su localización, confirmada por la Subdelegación del Gobierno en Segovia, generó una enorme alegría entre sus compañeros y los habitantes de Santa María la Real de Nieva. Se trataba del tercer suceso que tiene a la localidad como epicentro, después de que ese mismo lunes desapareciera una joven de 13 años y fuera localizada al día siguiente en Tabladillo. Había pasado la noche junto a un árbol intentando protegerse de la lluvia que estuvo cayendo todo el día. La trasladaron al Hospital de Segovia para ser examinada y luego regresó a su domicilio, en Paradinas, núcleo de Santa María.
Pero los vecinos de este municipio aún no se han sobrepuesto de otro caso ocurrido el pasado mes de diciembre, cuando un hombre apuñaló a la jueza titular, tras recibir la notificación de una condena. La magistrada aún no se ha incorporado a su trabajo.
“Llevamos varios sustos seguidos y eso que estábamos esperando que 2021 fuera mejor que el año pasado”, afirma la alcaldesa, Pilar Ares. Reconoce que todos estos sucesos tienen sobrecogidos a los vecinos porque en un pueblo pequeño todos se conocen. Recuerda que los vecinos inundaron las redes sociales de muestras de alegría con las apariciones, primero de la estudiante y luego del guardia civil.
Como el resto de vecinos, la alcaldesa se pregunta aún qué es lo que ocurrió en cada caso. Todavía quedan dudas y fluyen los bulos y la desinformación. Pilar Ares ha negado el capitán se mostrara agresivo cuando fue encontrado en Madrid. “En todo momento colaboró con sus compañeros”, afirmó en relación a informaciones publicadas en algunos medios. Ella conoce bien al capitán y a su familia, que vive en el municipio desde hace cuatro años. La esposa y todos sus parientes proceden de Santa María. “Es una gran familia, muy apreciada en el pueblo”. De él asegura no poder decir más que “maravillas”, puesto que siempre ha colaborado con el pueblo y sus habitantes.
Y es que este capitán de la Guardia Civil, que es ‘hijo del cuerpo’, ha desempeñado casi toda su carrera profesional en la provincia de Segovia. También guardan buen recuerdo de él tras su paso por los cuarteles en El Espinar, Cantalejo, y por la Comandancia de Segovia capital, donde ejerció como teniente responsable del Seprona.
De su trabajo en este departamento fue merecedor en el año 2014, antes de su ascenso a capitán, de la Medalla de Honor de las Naciones Unidas en reconocimiento a su labor en defensa de la capa de ozono. Se debió, entre otros motivos a una destacada operación de desmantelamiento de una red clandestina internacional que incumplía el reciclado de aparatos frigoríficos y los achatarraba. La operación conllevó la detención de 120 personas.
No fue la única actuación importante de este mando del Seprona, que estuvo trabajando para la Fiscalía de Medio Ambiente. “Era un guardia las 24 horas del día”, señalan algunos de sus compañeros que han trabajado con él.
De su profesionalidad y su empeño en el trabajo eran conscientes algunos de sus vecinos. Por ello, en las horas posteriores a su desaparición se llegó a pensar en la posibilidad de que alguna mafia se hubiera vengado y participara en la desaparición del agente.
J.C.O. se tomaba tan a pecho una gran operación, como la persecución a un cazador furtivo. Como ejemplo de iniciativa y de apoyo a los aficionados de la provincia puso en marcha en 2015 un proyecto innovador con aficionados a los galgos para luchar contra el furtivismo a través de un canal de Whatsapp, que luego se ha aplicado en otras zonas.
A nivel personal, quienes le conocen aseguran que la primera impresión aparenta ser una persona seria, “pero es divertido y sobre todo una buena persona, como toda su familia”, relata la alcaldesa. De hecho, estaba totalmente integrado en el pueblo. Participaba con compañeros y amigos en actividades deportivas como el pádel.
El hecho de que la familia de su mujer, regentara un bar en el pueblo, también hacía que tuvieran un contacto muy estrecho con los habitantes. Era frecuente verle en el bar ‘Tangolio’, donde trabajaba su familia. Se trata de un local municipal situado a los pies del Ayuntamiento que se saca a subasta cada cierto tiempo. Su esposa quería mantener su trabajo en la hostelería por lo que él prefirió esforzarse aunque se tuviera que desplazar a diario a Madrid, para lo que cogía el coche cada mañana y luego el AVE. Además las hijas del matrimonio tienen aquí a sus amigas, que están volcándose estos días con ellas y el resto de la familia, que sigue con la lógica afección.
