La NBA confirmó ayer que ha suspendido los partidos de la fase regular hasta el 15 de diciembre, después de que no se alcanzara un acuerdo en las últimas semanas entre los propietarios de las franquicias y el sindicato de jugadores, alargando así el ‘lockout’.
El conflicto, que dura ya casi cinco meses, ha provocado que algunos jugadores como Andrei Kirilenko, Rudy Fernández, Serge Ibaka, Tony Parker, o Andrés Nocioni, entre otros, hayan decidido regresar a sus países para no perder el ritmo de competición.
La confirmación a los clubes de la suspensión de estas próximas semanas, que se traduce en que no se disputarán 324 encuentros (el 26 por ciento de la temporada), llegó pocas horas antes de que algunos jugadores, entre los que se están Carmelo Anthony y Kevin Durant, presentaran una demanda colectiva antimonopolio contra la NBA en dos Estados, después de que el pasado lunes se disolviera el sindicato al no llegar a ningún acuerdo para desbloquear este paro.
Los profesionales han elegido para que les represente al abogado David Boies, que fue la cabeza visible de la NFL durante su conflicto laboral, y que aseguró que este cierre patronal infringe las leyes antimonopolio al negar a los afiliados la posibilidad de trabajar.
De esta forma, Carmelo Anthony y Chauncey Billups, de los New York Knicks, aparecen como denunciantes en la querella interpuesta en California contra la NBA y los dueños de los 30 equipos.
El caso enumera entre otros demandantes a Kevin Durant, que en las últimas semanas era pretendido por varios clubes de la Liga ACB, o el alero de los Memphis Grizzlies Leon Powe.
Por su parte, la NBA también presentó otra demanda preventiva con el objetivo de demostrar que este cierre patronal es totalmente legal. Además, señaló que sin un sindicato que realice las negociaciones colectivas en nombre de los profesionales se pueden declarar nulos los contratos garantizados que estos tienen.
Según confirmó la cadena de televisión especializada CNBC, los jugadores, al quedarse sin el primer cheque de su salario, perdieron un promedio de 220.000 dólares, y con las nueva cancelaciones de partidos también se quedarán sin los que tendrían que cobrar entre el 30 de noviembre y el próximo 15 de diciembre.
Sobre el cierre patronal en la Liga estadounidense, el entrenador del Real Madrid, Pablo Laso, precisó ayer que sigue con la misma planificación que la semana pasada, a pesar de los rumores de posibles fichajes como Marc Gasol y José Manuel Calderón.
«Pueden venir, pero cada uno tiene que valorar su propia situación, qué es lo que les conviene. Lo único que pienso es en el equipo que voy a tener los próximos días delante. Tenemos a uno temporal (Serge Ibaka) y a otro que nos gustaría que cumpliera un futuro largo con nosotros (Rudy Fernández). Estamos encantados con ellos, pero lo que pase en la NBA a nosotros no nos puede condicionar», sentenció.
