Tras la aprobación del presupuesto municipal, cuyo futuro no despertaba incógnitas debido al acuerdo firmado por PSOE, IU y Podemos, la sesión plenaria de ayer tardó casi tres horas en despejar la indefinición de los grupos políticos hacia la moción presentada por la formación morada en la que se solicitaba la reducción de sueldos y dietas a los ediles de la corporación municipal y la creación de un fondo de solidaridad para los colectivos más afectados por la crisis económica del covid-19.
Días antes, todos ellos habían expresado ante los medios de comunicación su malestar y disgusto por la iniciativa presentada por Podemos, que quería llevar al túnel del tiempo las retribuciones municipales para situarlas en el año 2015, así como reducir un 10 por ciento las dietas que los concejales cobran por asistencia a plenos y comisiones municipales.
El debate de la moción reiteró la desaprobación general del equipo de Gobierno y de la oposición hacia la moción, defendida por el concejal de Podemos Guillermo San Juan con su habitual tono conciliador, para apelar a la conciencia personal de cada uno de los concejales a la hora de recabar el apoyo a su propuesta. Así, señaló que la bajada de los sueldos reportaría 70.000 euros a las arcas municipales, que podrían ser empleados para atender las necesidades generadas por la crisis económica a colectivos tan golpeados como el sector del taxi. “Tenemos que tomar una decisión que va más allá del debate político –explicó San Juan- y no echar balones fuera: ¿estamos dispuestos a apretarnos el cinturón?”.
La respuesta no se hizo esperar, y llamó significativamente la atención la de Izquierda Unida, cuyo portavoz Ángel Galindo reprochó a su compañero el dinero que cobra en concepto de dietas por su asistencia a plenos y comisiones, que cifró en 2.000 euros, expresando su perplejidad por el hecho de que la reducción que propone era menos significativa en este apartado que en el de los sueldos de los ediles liberados.
Por ello, propuso a Podemos que incluyera una modificación en la moción para que las retribuciones en concepto de dietas se redujeran a 20 euros “para aplicar la coherencia que reclama”. “Usted con las dietas cobra más que algunos concejales liberados –espetó Galindo- incluso por su participación en la Junta de Gobierno, donde lo hace con voz y sin voto”.
Trabajo
Por su parte, los socialistas dejaron en manos de Andrés Torquemada la respuesta a la moción, en la que recordó que las retribuciones de los concejales van en función de la responsabilidad que ostentan, y señaló que los ciudadanos “quieren que los políticos nos dejemos de líos y que se vean los frutos de nuestro trabajo, y no piensan tanto en las retribuciones”. Además, recordó que las partidas presupuestarias a tal fin están “muy por debajo” de los máximos que permite la ley en este concepto e indicó que la congelación de los sueldos de los ediles registrada este año es “un gesto más que suficiente”.
En el lado de la oposición, Ciudadanos y Partido Popular tiraron por elevación y criticaron la postura “hipócrita” en palabras de la portavoz liberal Noemí Otero de Podemos que defiende el recorte de salarios mientras que en el Gobierno de España su formación política ha ampliado hasta en 155 los cargos públicos con la ampliación del Consejo de Ministros. La concejala popular Azucena Suárez calificó de “tremendo acto de populismo” la propuesta de Podemos con el objetivo de ”blanquear los excesos económicos” de su formación.
Obviamente, la enmienda de IU, que fue calificada como “enmienda pataleta» por San Juan, no fue aceptada por Podemos, y la votación final aclaró posturasa con el voto en contra de socialistas, populares e IU y la abstención de Ciudadanos.
