Extraña y atípica, la inauguración de los belenes de este 2020 por parte de la Asociación de Belenistas de Cuéllar fue un escueto acto pero cargado de emoción y sentimiento. En la iglesia de San Miguel, autoridades como el alcalde y la concejal de Educación, o la procuradora Marta Sanz, asistieron a la apertura de las creaciones de este grupo que ni siquiera en pandemia ha frenado: al contrario, han creado más que nunca.
Su presidenta, Sonia Martín, tuvo palabras de agradecimiento para todo el grupo en un año en el que trabajar en el taller ha sido diferente: menos personas, más trabajo y unas circunstancias que hacían ver la meta con incertidumbre. Pero la meta ha llegado y como cada 5 de diciembre, las creaciones de estos cuellaranos han visto la luz. El primero de los belenes se ubica en la iglesia de San Miguel, tras la verja de la capilla de Los Pardo, y pretende estar cerrado como tal -visible desde la verja- para evitar aglomeraciones. El segundo estrena espacio, el Santuario de El Henar; el rector y la madre superiora acudieron a esta inauguración para abrir después las puertas a este nuevo punto de encuentro con los belenes.
Entre las palabras de apertura del acto, la presidenta de los belenistas dio a conocer la gran noticia para la asociación y para Cuéllar en general: la villa será sede del Congreso de Belenistas de 2022. La noticia, inmejorable para la localidad, llega en un momento agridulce para todos los belenistas, puesto que fue el recientemente fallecido presidente de la Federación Española, Carles Tarragó, quien motivó que fuera Cuéllar la sede del evento próximamente. Todos los belenes de las asociaciones federadas muestran una rosa blanca en su portal para recordar “a alguien que amaba tanto el belenismo”. Emotivo y sincero, el homenaje en Cuéllar se une al de cientos de asociaciones que no han dejado de crear este año, a pesar de todas las dificultades.
El párroco de la localidad, Fernando Mateo, bendijo el Belén de San Miguel y tuvo unas palabras referentes a la situación actual: “ojalá esta pandemia traiga un cambio en la sociedad, una conversión, salir del egoísmo y el orgullo”.
Los belenes podrán visitarse hasta el 7 de enero bajo las normas anticovid que imperan en los templos, sin superar aforos y guardando las distancias todo lo posible. Aunque distinta, la Navidad en Cuéllar mantiene su espíritu con los belenes creados por la Asociación, este año con más significado si cabe.
