Las residencias de mayores, centros de personas con discapacidad y viviendas tuteladas de Castilla y León han alcanzado este sábado los 3.400 fallecidos desde que comenzó la pandemia del coronavirus, de entre los que 1.986 usuarios (el 58%) murieron en los propios centros y 1.414 (el 42%) en los hospitales de la Comunidad. Este dato de fallecimientos equivale al 8,2 por ciento de los usuarios de residencias existentes en Castilla y León, cifrados por la Junta en 41.411, mientras que la mortalidad total fue de 10.276 desde el 14 de marzo (el 33% por covid).
Según los datos aportados por la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, en esta última jornada se han registrado once fallecimientos de usuarios de residencias, de ellos cinco en los propios centros y seis que fueron trasladados previamente a los hospitales. En este registro de fallecimientos, la Consejería distingue entre los 2.295 que murieron con la covid confirmada mediante una prueba y los 1.105 que lo hicieron con síntomas compatibles pero sin acceso a una prueba de detección, lo que ocurrió fundamentalmente en la primera ola, en el momento en el que no había disponibles test.
En este tiempo, la Consejería ha detectado 12.106 casos confirmados con test, 10.416 han superado la infección. En la actualidad sólo 37 residentes permanecen aislados con síntomas compatibles con covid y otros 1.365 están en aislamiento preventivo sin síntomas.
