Dolor, llanto y rabia, mucha rabia en Don Benito (Badajoz). El conductor de la retroexcavadora con la que chocó el minibús el pasado jueves en Castuera fue detenido ayer por dar positivo en las pruebas de consumo de drogas -cannabis y cocaína-, en un accidente en el que fallecieron cinco personas, cuatro de ellas menores de edad, del club CD Monterrubio.
Mientras, de los seis heridos que continuaban ingresados en el Hospital de Don Benito-Villanueva, cuatro siguen allí y a dos se les dio el alta. De los atendidos, tres son menores y el cuatro es un adulto de 77 años, que se encuentra en observación ya que, al igual que uno de los niños que ya se fueron a su casa, presenta úlceras corneales, mientras que el pequeño tiene fractura de clavícula y heridas en dorso.
Por su parte, la evolución de los tres adolescentes que permanecen ingresados, dos chicos de 14 y otro de 12, es «favorable».
Las muestras de dolor por parte de familiares y demás allegados de las víctimas se fueron sucediendo en los alrededores del centro médico, siendo atendidos por un equipo de ocho psicólogos.
Dado que los chavales eran deportistas, el funeral tendrá lugar hoy a las 11,00 horas en el polideportivo del municipio de Monterrubio de la Serena. El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, asistirá a las exequias.
Por otra parte, asociaciones de automovilistas y de víctimas de accidentes de tráfico reclamaron que se impongan más medidas de seguridad en los autobuses, que se incida en las medidas de contención de las vías y que se creen caminos específicos para la circulación de maquinaria agrícola para evitar que se puedan tragedias como ésta.
En lo que sí incidieron estos colectivos es que se desconocen detalles de la tragedia. Así, el presidente de la asociación DIA, Francisco Canes, se mostró extrañado de que un accidente que, por las imágenes, «no parece nada espectacular» haya tenido consecuencias tan graves. «Se ha producido un vuelco del microbús, pero no ha habido aplastamiento del techo. Habrá que ver si iba una velocidad inadecuada o si había o se usaron los cinturones de seguridad». No obstante, destacó que los pasajeros que están situados junto a las ventanillas continúan sin estar bien protegidos, por lo que pidió airbags laterales.
España llora
Cualquier tipo de tragedia afecta al ciudadano de a pie, pero cuando encima se trata de niños, más todavía. Las redes sociales fueron testigo ayer de las enormes muestras de solidaridad de los españoles que, de alguna manera, se quisieron sumar al dolor de los allegados de las víctimas y ayudar en todo lo posible. Los medios de comunicación también pusieron su granito de arena, y radios, televisiones y páginas web nacionales pedían donaciones de sangre para el Hospital de Don Benito-Villanueva. De hecho, hubo cierta confusión y vecinos de la zona acudieron a un centro médico cercano en el que no recibían las transfusiones.
Mientras, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, expresó su enorme pesar por este drama. «Consternado por el trágico accidente de Badajoz. Mi pésame a la familia de las víctimas y compañeros», escribió en Twitter. Los Reyes y los Príncipes de Asturias expresaron su pésame a las familias, al igual que varios miembros del Ejecutivo central. «Probablemente, están viviendo lo más difícil de su vida: la muerte de un hijo», comentó la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría.
Como era de esperar, todos los partidos políticos suspendieron en la fatídica noche los actos de arranque de la campaña para las elecciones europeas en la región de Extremadura. De hecho, la candidata socialista, Elena Valenciano, tuvo que cancelar su mitin de ayer en Cáceres.
