Arropado por la plana mayor del PP de Segovia, Jesús Postigo fue presentado ayer como el candidato popular a la alcaldía de la capital en un acto en el que el ex presidente de la Cámara de Comercio esbozó las líneas maestras de su programa electoral, cuya piedra angular será “el desarrollo económico de la ciudad de Segovia”.
La ‘presentación en sociedad’ de Postigo como número 1 en la lista del PP permitió desvelar al menos cuatro ejes de su proyecto.
En primer lugar, Postigo afronta el reto con una mentalidad empresarial. “Mi aspiración no es otra que trasladar mi experiencia de estos años al frente de la Cámara de Comercio de Segovia a la vida política municipal”, afirmó. El aspirante a alcalde quiere, por tanto, aplicar en el Ayuntamiento las mismas fórmulas que ha utilizado, con éxito, en su empresa y en la entidad cameral.
En segundo lugar, Postigo desea ejercer de entrenador de un gran equipo (“soy un hombre de equipo”, aseguró), y compara esa filosofía suya con la del alcalde actual, Pedro Arahuetes, cuyo proyecto acusó de “personalista”. Pero, a pesar de esa crítica, Postigo dijo “querer contar con todos” en su equipo, incluso con el actual regidor, mostrándose dispuesto, en caso de que el PP gane las elecciones del 22-M, a que sea Arahuetes quien defienda la candidatura de Segovia 2016, en el mes de junio. “Es de bien nacidos ser agradecidos, y creo que es lo correcto que haga la presentación quien haya desarrollado el proyecto”, argumentó.
En tercer lugar, Postigo aspira a diseñar la Segovia del futuro, no la de mañana ni la de pasado. “Nuestra ambición como ciudad debe ir más allá de 2016”, reclamó.
Y, en cuarto lugar, Postigo plantea un nuevo estilo de hacer política en el Ayuntamiento, de fair play, crítico con los socialistas pero, al tiempo, correcto. “Mi campaña será exquisitamente respetuosa con las personas”, avisó, aunque para matizar a renglón seguido que “si tengo que defenderme, será con contundencia”.
En su primera intervención pública tras ser proclamado candidato del PP, y con una soltura impropia para un novato en esas lides, Postigo puso el acento en los temas económicos, aunque previamente no olvidó el protocolario agradecimiento al Partido Popular por la confianza que ha depositado en él ni tampoco manifestar que asume el reto “con enorme ilusión, grandísimo orgullo y total responsabilidad”.
Ya metido en harina, el candidato dejó varias frases sobre la tarea que debe emprender: “Asumo la responsabilidad de trabajar por el desarrollo y el crecimiento económico de Segovia”, “… tenemos que poner los nuevos ejes del desarrollo de Segovia, y todo ello con una grandísima ilusión y mucha humildad”… Pero, sin lugar a dudas, las dos frases más esclarecedoras de su filosofía llegaron cuando defendió que “el verdadero protagonista de la creación de empleo es el empresario” y, a continuación, dijo que a los políticos les corresponde “crear el entorno y el contexto” para facilitar la labor de los emprendedores.
En su discurso, también se ocupó de Arahuetes. “El proyecto socialista, después de ocho años de gobierno, ha tocado a su fin”, declaró. A su juicio, ese proyecto se encuentra ahora “agotado y sin ideas”. “Somos muchos los que pensamos que es necesaria una renovación de ideas y de personas para dar el impulso que Segovia necesita y merece”, consideró.
A modo de colofón, Postigo declaró que su proyecto se basará “en una Segovia más competitiva”, en la que el desarrollo económico y el empleo sean los motores de crecimiento de la ciudad. En el apartado cultural, se posicionó a favor de una Segovia “respetuosa con su pasado” y cuyo patrimonio “sea un bien de todos y para todos”.
Acabado su discurso, y a preguntas de los periodistas, negó en rotundo haber solicitado al PP, en caso de no llegar a la alcaldía, ser candidato al Congreso o al Senado en 2012. “No atisbo la posibilidad de perder estos comicios, pero si el 22 de mayo Segovia decide que otro sea el alcalde, yo permaneceré en la oposición. No me marcharé de Segovia a otro puesto”, insistió.
El empresario, afiliado al PP desde inicios de los 90, reconoció que su implicación en el partido ha resultado escasa, por voluntad propia, y con el propósito de desvincular su militancia de la presidencia de la Cámara de Comercio, que ostentó durante doce años.
Sobre su vinculación con la empresa de la que es consejero delegado, Gráficas Ceyde, anunció su intención de irse desligando progresivamente de ella, según avance la campaña electoral. Y, sobre los contratos de Ceyde con el Ayuntamiento, fue tajante.“En el momento que yo reciba el acta de concejal, Ceyde dejará de trabajar con el Ayuntamiento”, aseguró, aunque eximiendo de tal compromiso los trabajos ya contratados, que la empresa ejecutará “por una cuestión de responsabilidad”.
Finalmente, preguntado por los integrantes de su lista, se limitó a decir que tiene “muchos nombres en la cabeza” y que “mucha gente” se ha puesto a su disposición, aunque reconociendo que todavía no ha confeccionado el “núcleo duro” de la candidatura.
