La celebración de la festividad de Todos Los Santos el 1 de noviembre y la de los Fieles Difuntos el 2 de noviembre vuelven a concentrar un año más la afluencia al cementerio para las visitas a los seres queridos. La crisis sanitaria ha obligado al Ayuntamiento a adoptar medidas de seguridad específicas a través de la Concejalía de Servicios Sociales, que ha preparado un dispositivo especial de seguridad ante la previsible gran afluencia de gente en las instalaciones de los cementerios municipales (Segovia, Zamarramala y Fuentemilanos) a lo largo de esa fecha y durante los días más próximos.
Tras la orden de la Junta en la que se establecen medidas sanitarias preventivas para el acceso a cementerios (entre estas, la limitación del aforo en un 50%), el Ayuntamiento ha establecido una serie de normas de seguridad que se aplicarán hasta el 8 de noviembre.
Así, el horario del cementerio municipal en este periodo será de 9:00 a 18:30 horas. Será obligatorio seguir en todo momento las instrucciones del personal del Ayuntamiento y de la Policía Local y Nacional que estará allí presente. Se establecerá una puerta únicamente de entrada y otra de salida, y se señalarán los trayectos por los que caminar dentro de las instalaciones.
Como es habitual, el uso de mascarilla y el lavado de manos con hidrogel son obligatorios, y se controlará el aforo y el tiempo máximo de permanencia será de 45 minutos.
Tanto la capilla como los aseos del cementerio permanecerán cerrados al público (salvo en caso de urgencia), y será necesario guardar una distancia interpersonal de al menos dos metros.
Desde la concejalía de Servicios Sociales se recomienda realizar visitas escalonadas y evitar el uso de coches privados para acudir al cementerio en la medida de lo posible, con el fin de evitar aglomeraciones.
La diócesis trasladará a la iglesia de Padre Claret la misa de Difuntos el días 1 de noviembre, que será oficiada por el obispo de Segovia César Franco.
