Con satisfacción se ha recibido en los barrios de San José y El Palo la intervención que ha presentado la Concejalía de Obras para ejecutar uno de los proyectos estrella de los Presupuestos Participativos del Ayuntamiento de Segovia, los dos ascensores que mejorarán la accesibilidad de una zona en la que además residen muchas personas mayores, como explica la presidenta de la Asociación de Vecinos 1º de Mayo, Teresa Ruano.
La alcaldesa, Clara Luquero, y el concejal de Obras, Servicios e Infraestructuras, Miguel Merino, han explicado las características básicas de esta intervención que, además de salvar el desnivel existente entre la calle de Mónaco y la carretera de Valdevilla y el que separa esta última del barrio de El Palo-Mirasierra, implica una mejora general con la urbanización de espacios, por ejemplo dando salida a la calle de Manuel de Falla para comunicar esta con las rampas de acceso a la calle de Mirasierra. En total, un desnivel de 15 metros.
Merino ha explicado a El Adelantado que el proyecto puede ser aprobado en la Junta de Gobierno Local de la próxima semana y en pocos días comenzará el procedimiento de licitación del contrato de obras, con un presupuesto de 450.000 euros. El comienzo de la intervención está previsto para octubre con un plazo de ejecución de 121 días, que el edil socialista extiende a algo más de cinco meses teniendo en cuenta festivos, días inhábiles en el sector de la construcción, etc.
El resultado final permitirá un recorrido accesible, incluyendo pavimentación y mejoras en la carretera de Valdevilla, mientras que en Manuel de Falla se eliminará el fondo de saco actual, eliminando la piedra para dar continuidad a la calle. El proyecto incluye un nuevo núcleo de comunicación entre este punto y la acera Este, que permitirá circular hasta la calle de Mirasierra mediante las rampas ya existentes en la plaza de Esteban Arteaga.
La Concejalía quiere conjugar movilidad y accesibilidad, ya que este recorrido conectará con dos líneas de los autobuses urbanos de la ciudad, la 1 (San José-Centro Histórico), en la calle de Mónaco, y la 5 (Nueva Segovia-Centro Histórico), en la calle de Mirasierra, en el límite con el barrio de la Comunidad de Ciudad y Tierra.
Desde la Asociación de Vecinos, que representa en la actualidad a los dos barrios, San José y El Palo (se podría decir incluso a tres, pues las viviendas de la carretera de Valdevilla han conformado históricamente una zona con singularidad propia), Ruano no ahorra calificativos hacia el proyecto: “genial”, “espectacular” y, sobre todo, “muy necesario”, recalca, aunque añade que en las circunstancias actuales puede parecer que hay otras prioridades.
En este sentido, explica que los vecinos de El Palo, aunque disponen de varios supermercados en la confluencia del puente de Valdevilla con la carretera de San Rafael, tienen igualmente que salvar el desnivel existente con Valdevilla, mientras desde el gobierno municipal Merino indica que el eje más transitado en esta zona de la ciudad se corresponde con el recorrido que incluirá los dos ascensores.

