Este anticipo del mes de julio corresponde al 80 por ciento de la recaudación de tributos durante el primer semestre de este año, según ha informado la entidad provincial en una nota de prensa.
La junta de Gobierno de la Diputación dio el visto bueno ayer a esta medida económica en virtud del régimen de entregas a cuenta aprobado por la corporación provincial en el año 2006.
En ese momento se delegó en la junta de Gobierno la ordenación de los pagos que, en aplicación de los criterios determinados en dicho régimen, corresponde percibir por cada entidad local.
El citado acuerdo de 2006 estableció cuatro pagos a cuenta durante el año: Tres en los meses de abril, junio y septiembre, equivalentes en cada caso al 25 por ciento de la recaudación neta obtenida de los padrones puestos al cobro en el ejercicio anterior, y un cuarto anticipo en el mes de diciembre, por la diferencia entre las sumas de las cantidades entregadas en los meses anteriores con respecto al 80 por ciento de los cargos netos del año en curso.
A estas entregas a cuenta se añade el pago de la liquidación definitiva del ejercicio, que se lleva a cabo en los meses de febrero a marzo de cada año.
En el actual régimen de entregas a cuenta, también se establecía la entrega de un anticipo en el mes de julio de cada año, equivalente al 80 por ciento del importe a que ascendiera la recaudación obtenida en periodo voluntario de pago, durante el primer semestre del ejercicio y correspondientes a las liquidaciones de ingreso directo recaudadas a favor de cada una de las entidades locales.
Ese es el anticipo cuyo pago fue aprobado ayer por la junta de Gobierno de la Diputación y que asciende a 937.749 euros a repartir entre los ayuntamientos y entidades locales que han delegado en la institución el cobro de sus tributos.
