La provincia de Segovia contabiliza un repunte desde marzo en su cifra de muertes de casi 700 muertes respecto a la media de años anteriores. Aunque las cifras oficiales de víctimas del Covid-19 se sitúan en las 506 hasta el día de ayer, lo cierto es que la estadística demuestra que muchas más personas han fallecido en Segovia por causas directas o indirectas durante estos meses de pandemia.
Según las cifras oficiales ofrecidas por la Junta, en estos momentos han muerto en Segovia por causa relacionada con el coronavirus un total de 506 personas, que se subdividen en 204 muertos en el Hospital y 386 víctimas en residencias. La suma de las dos anteriores no da como resultado la primera, ya que en los primeros momentos de la pandemia algunas de las defunciones de residentes que se produjeron en el Hospital se contabilizaron en ambas estadísticas.
De este modo, si se atiende a la cifra total de fallecimientos localizados en la provincia desde el inicio de la pandemia, se observa un pico mucho más acusado que esas 506 muertes. En marzo, la media de defunciones desde 2017 a 2019 se situó en las 140, cuando en 2020 la cifra de fallecimientos alcanzó las 273. Mucho más pronunciado es el dato de abril, con una media durante los tres años anteriores de 136 muertes, pero que durante este año contabilizó 682, un pico de 546 decesos en tan solo un mes. Aunque todavía no se puede realizar la comparativa con mayo, dado que no ha acabado el mes, la cifra oficial de muertes se sitúa en 19 en la provincia, por lo que sumada a los repuntes de marzo y abril situaría la cifra de mortalidad ‘extra’ en casi 700.
Estas cifras aumentan las ya anunciadas por el TSJCyL, cuando el 12 de mayo calculaba a través de las licencias de enterramientos un total de 583 muertes ‘extra’ en Segovia durante los meses de marzo y abril.
Hay que recordar que estas cifras contabilizan las muertes totales y que el número de fallecidos bascula entre los distintos años, pero permite a través de los picos establecer de una manera aproximada el verdadero impacto de la pandemia, ya que en la primera fase su virulencia no permitió contabilizar los datos de forma precisa y tampoco las cifras oficiales tienen en cuenta las muertes indirectas.
Otra consideración a tener en cuenta es el enorme impacto del virus en la provincia, la más castigada de toda la Comunidad. Segovia cuenta con la tasa provincial más alta de fallecimientos por cada 1.000 personas en el primer cuatrimestre y junto a la de Soria destaca por su alto porcentaje.
La provincia obtuvo en 2017 un 4,63% de fallecidos por cada mil personas en el primer cuatrimestre, 4,64% en 2018, un 4,11% en 2019 y un 8,78% en 2020. Como se puede apreciar, el porcentaje es del doble de muertes por 1.000 habitantes durante el primer trimestre de este año.
En comparación con las tasas de 2020 del resto de la Comunidad, Segovia con el 8,78% se sitúa como la primera, seguida de Soria con el 8,41% y después vendría Ávila con el 6,87%. Esta última caída demuestra que Segovia y Soria han sido las más perjudicadas y deja de manifiesto la virulencia del brote registrado en la provincia.
Otro dato representativo que las cifras y tasas de mortandad dejan, es la gran letalidad que muestra la enfermedad en las personas mayores respecto a otros grupos de edades. De esta forma, se puede observar como la cifra de fallecidos es progresiva y mientras los grupos más jóvenes han contabilizado pocas o ninguna muerte, va creciendo de forma sostenida por las edades más adultas hasta el aumento exponencial registrado en los conjuntos de mayor edad.
De esta forma, de los 506 muertos contabilizados en las estadísticas oficiales, 383 personas tenían más de 80 años, por lo que el 75,7% de los fallecimientos registrados en la provincia se localizan en esa franja de edad. Sobre el resto de grupos, 72 se registraron entre los 70-79 años, 32 entre los 60-69, 12 en la franja 50-59, cuatro en 40-49 y uno en los treintañeros. De hecho, de las muertes registradas en los últimos siete días, un total de ocho, se encuentran siete en esa franja de más de 80 y una en la de la cincuentena.
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Además, se puede observar también como el virus contempla una mayor letalidad en los varones que en las mujeres de todos los grupos de edad de la provincia. Incluso, se registra un mayor número de fallecimientos entre hombres en los grupos de edad donde tienen una mayor representación las mujeres, como en la ancianidad, donde se ha registrado 202 muertes de varones y 181 en mujeres mayores de 80 años.
