El Barcelona remontó ayer ante Estudiantes de La Plata en la final del Mundial de Clubes disputada en Abu Dhabi, en la que los ‘culés’ se sobrepusieron al tanto inicial de Boselli para acabar ganando con un gol de Messi en la segunda parte de la prórroga. El éxito supuso el sexto título de la escuadra en 2009, y el primero del club en esta competición.
El conjunto catalán dio la vuelta al marcador con una mezcla de buen juego -durante los segundos 45 minutos y la el tiempo extra- y épica. Pedro, que salió al césped en sustitución de Keita, neutralizó el 0-1, y luego, Messi anotó con el pecho para desequilibrar la balanza de forma definitiva.
El trofeo tiene una enorme importancia, pues consagra al Barcelona como el único equipo en la historia del fútbol que logra seis títulos en un año.
El compromiso tuvo dos mitades muy diferenciadas. Mientras que en la primera no hubo brillo, y ambos bloques ofrecieron un ritmo cansino, en la segunda el dominio de los hombres de Guardiola fue total.
Con la baja segura de Andrés Iniesta por lesión, el ‘míster’ optó por devolver la titularidad a Thierry Henry, en detrimento de Pedro. Además, Seydou Keita volvió al once, pues ya se encontraba recuperado de los problemas musculares que sufría.
El equipo de la Ciudad Condal se pudo adelantar en el minuto 8, pero Xavi, que se plantó solo en el área de Albil, decidió pasar y no tirar, cuando tenía todo a su favor.
A partir de ahí, los españoles siguieron dominando, aunque las ocasiones más claras las generaron los argentinos. La ‘Brujita’ Verón, por ejemplo, lo intentó, pero su remate desde fuera del área no inquietó a Víctor Valdés.
Boselli, en cambio, no falló. Un gran centro de Díaz desde la izquierda lo aprovechó el ex de la cantera del Málaga, que se coló entre Puyol y Abidal para, con un certero testarazo, batir al arquero rival.
Tras el descanso, Guardiola tomó el mando y cambió la forma de atacar de su bloque. Recurrió a Pedro y transformó el 4-3-3 habitual en un 4-2-4, con Messi e Ibrahimovic en punta y el canario y Henry por las alas.
Por medio del sueco llegaron las primeras oportunidades. Un tiro suyo se fue lamiendo el palo, y después, una fantástica internada resultó abortada por Albil, que veía cómo se le empezaba a acumular el trabajo.
El acoso del Barça no paró, pero la falta de puntería desesperó poco a poco a la escuadra. No obstante, y cuando ya se daba por garantizado que la maldición blaugrana en este torneo continuaría, apareció Pedro.
El isleño no faltó a su cita con el gol y en el minuto 89, uno de los enésimos balones colgados al área lo tocó Piqué, y él lo convirtió en el salvador 1-1.
En el tiempo suplementario, ambos contendientes se mantuvieron fieles a su filosofía. El Barcelona buscaba una nueva diana utilizando el toque y la combinación, mientras que los sudamericanos, ‘tocados’ moralmente, se limitaron a intentar forzar la tanda de penaltis. También deseaban hacer daño a la contra, pero no les quedaban apenas fuerzas.
El canterano Jeffren, que relevó a Henry, estuvo muy activo y asustó a los adversarios, pese a que no se mostró demasiado inspirado a la hora de definir, arte siempre complicada.
Messi resolvió en la segunda parte de la prórroga. Alves puso un maravilloso centro desde la derecha y el reciente ganador del Balón de Oro, entrando desde atrás, marcó con el pecho.
Los pupilos de Pep Guardiola lograron conservar su ventaja hasta el final, y cerraron un año 2009 realmente mágico.
Guardiola: «Felicito y doy las gracias a la plantilla»
El entrenador del Barcelona, Pep Guardiola, volvió a optar por un discurso modesto, pese al éxito que completó ayer.
«Hemos conseguido un logro muy importante, pero no me considero el rey del mundo. Solo soy una persona extremadamente feliz y cansada».
El preparador celebró que el título llegase de «forma épica», aunque también reconoció que temió la derrota, y alabó al rival, Estudiantes de La Plata, del que dijo que fue «un noble adversario».
En otro de sus argumentos clásicos, concedió casi todo el mérito a los jugadores. «Felicito a los futbolistas, y les tengo que dar las gracias. La gente se lo ha pasado muy bien y esto me parece mérito de la institución. Somos diferentes, por ejemplo porque llevamos Unicef en la camiseta, y en lugar de cobrar, pagamos».
El de Santpedor analizó el año completo. «Dentro de un tiempo repararemos en lo que ha pasado. Me satisface porque creo que la afición se ha visto recompensada. Deseo acordarme, por supuesto, de todos los miembros de la plantilla, incluidos Sylvinho, Samuel Eto’o, Alexander Hleb, Eidur Gudjohnsen y Martín Cáceres».
El ‘míster’ catalán también se refirió al fantástico momento en el que se encuentra Pedro, y destacó la labor realizada por Jeffren, Henry y Messi.
Del compromiso en sí, apuntó que transmitió la idea de desgastar el oponente en la prórroga, y esperar a que se produjera la oportunidad para marcar.
Finalmente, volvió a dedicar halagos a sus pupilos. «Dirijo a un grupo al que le gusta jugar al fútbol, y lo hace más por disfrutar que por cumplir con su profesión. De cualquier modo, solo continuaremos ganando si mantenemos el nivel de trabajo».
