Si la pasión por el carnaval que muestran las comparsas segovianas fuera directamente proporcional con el número de personas que participan activamente en las fiestas, la ciudad necesitaría crear un ‘sambódromo’ para albergar la ingente cantidad de público que generaría esta fiesta. Pero no es así. Segovia no parece afrontar esta fiesta en la calle pese a los esfuerzos municipales por intentar crear cauces que contribuyan a tal fin, y ni siquiera el disfraz de primavera que se puso ayer el invierno consiguió atraer al público para participar en el ‘Domingo Gordo’ con el que comenzaron las fiestas que preludian el tiempo de Cuaresma.
La Plaza Mayor fue, una vez más, el lugar elegido para la concentración de las comparsas oficiales, que llegaron hasta las inmediaciones del quiosco en desigual desfile, acompañadas por las charangas que animaban su recorrido y por la propia música de las agrupaciones carnavaleras.
Frente al templete, los niños y niñas designados por las comparsas participaron en la elección de ‘Príncipe y Princesa del Carnaval’, cargo para el que este año fueron designadas las ‘princesas’ de la comparsa Semaforitos Ana Barrio y Lucía Escribano, vestidas con los ricos ropajes de la boda hindú que este año llevan a la calle los comparsistas del barrio de San José.
Después fue el turno del pregón, este año a cargo de Mayte Hernangómez, directora del Taller Municipal de Teatro, que puso todo su esfuerzo interpretativo en recrear tres “encarnaciones” que le sugiere este tiempo, animando con ello a los segovianos a que en este tiempo “podeamos realizar cualquier sueño que queramos, feo o precioso, turbador o soñador”.
Así, Hernangómez interpretó el monólogo de Lady Macbeth de la inmortal obra de Shakespeare para concluir que “no se puede dormir tranquilo con tanto muerto a las espaldas”.
También puso sobre el escenario como la Estatua de la Libertad las primeras frases del histórico discurso de Martin Luther King que pronunció en agosto de 1963 en Washington para abogar por la igualdad entre las personas, y aseguró que casi 60 años después su mensaje “todavía sigue vigente”.
Pero su tercera encarnación fue la más complicada, en la que ataviada con una montera y un manteo animó a los segovianos a desmontar el mito de que “somos unos sosos” bailando la jota interpretada por el dulzainero Juan Sevilla y el tamborilero Mateo San Romualdo; y aunque consiguió elevar los brazos de un buen número de personas, su empresa no ofreció el resultado apetecido.
La alcaldesa Clara Luquero, con una máscara de inspiración veneciana ocultando su rostro y la concejala de Cultura Gina Aguiar –que empleó la sonrisa del cartel anunciador de este año como careta- participaron en la inauguración carnavalera, y Luquero volvió a redoblar la invitación a la participación durante estos días, apoyados por el buen tiempo de las próximas jornadas.
La primera fase del concurso de coplas, en el que las comparsas cantaron las letras creadas para este año, dio paso al almuerzo solidario con los judiones como protagonistas elaborado por la Asociación de Cocineros, cuya recaudación irá a parar a la asociación ‘Segovia de mil colores’, colectivo que trabaja en la ayuda y el apoyo a las familias que tienen personas con problemas de desarrollo.
Greta Thurnberg , el socavón de San Millán… y la vaca Lola
Cargados de ilusión y conscientes de sus limitaciones como coros y solistas, las comparsas volvieron a cargar la tinta en sus coplas carnavaleras para ofrecer una visión de la actualidad internacional, nacional y local salpimentada con la ironía y la acidez de la crítica ciudadana. Este año, las comparsas parecen haberse decantado más por asuntos foráneos como la crisis catalana, el ‘brexit’, la presencia en España de la joven activista medioambiental Greta Thunberg o el ‘culebrón’ de la presencia de la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez y su encuentro con el vicepresidente Ábalos.
En el ámbito local, asuntos ya recurrentes como el CAT o la SG-20 volvieron a la palestra en forma de coplas, a los que se unieron otros de más actualidad como la dimisión del director de la Muestra de Cine Europeo Eliseo de Pablos o el socavón que en agosto produjeron las riadas por la tormenta caída en el barrio de San Millán.
La ambientación musical sigue la senda de años anteriores, y las comparsas recurren a canciones conocidas para buscar acomodo a sus letras, a excepción de la comparsa Chirigoteros, que imbuidos de su espíritu flamenco, crearon unos tanguillos para poner música a sus coplas.
Las notas distintivas las pusieron las comparsas Semaforitos, conu una canción dedicada a la vaca que les acompaña estos días en su periplo festivo y Para que Tu lo Bailes, con una copla alejada de cualquier tipo de crítica y que invita simplemente a la alegría festiva. Pues que así sea.
